La pena más alta fue solicitada para Jaime debido a que este ya tiene una condena a seis meses de prisión en suspenso por la sustracción de documentos de prueba. El fiscal propuso que la condena de 10 años y 10 meses por la tragedia de Once ahora se unifique con la anterior en una sola de 11 años de cárcel y 11 años de inhablitacion para ejercer cargos públicos.

El fiscal solicitó, además, que Mario Cirigliano, hermano de Claudio, el dueño de la empresa, también sea condenado a la pena de 10 años y 6 meses de prisión. Todos los procesados están acusados por los delitos de "administración fraudulenta" y "estrago culposo", salvo el motorman, a quien se lo juzga solo por "estrago culposo".

El 22 de febrero de 2012 una formación del tren suburbano de la línea Sarmiento no logró frenar al llegar a la terminal de Once y se estrelló contra los paragolpes de contención de la cabecera del andén. Murieron 51 personas y otras 789 sufrieron heridas.