16:51 › UN HOSPITAL SE EXCUSó DE REALIZAR LA OPERACIóN
La madre de una joven que padece de una deficiencia mental y tiene un embarazo de once semanas que podría ser producto de una violación pidió a la Justicia que autorice a realizarle un aborto, luego de que las autoridades del Hospital Militar de Mendoza se excusaran, solicitando un tiempo para analizar la situación.
Los abogados Dante Vega y Diego Lavado realizaron la presentación ante el Primer Juzgado de Familia para que este arbitre los medios necesarios y decida si se puede agilizar la aprobación para interrumpir la gestación.
Previo a la presentación judicial, la madre con su hija se presentó ante el hospital, junto a sus representantes legales, y solicitó que se le practique el aborto a la joven, amparándose en el artículo 86 inciso segundo del Código Penal, pero los directivos no dieron el consentimiento y, en cambio, convocaron al Comité de Bioética para analizar los pasos a seguir.
"El tema es que no queremos que pase más tiempo. La joven es deficiente mental y el embarazo ya lleva once semanas. Sino se practica el aborto rápidamente, podemos llegar a un punto en que no se pueda realizar", explicó Vega.
"Además, la joven de 25 años, que tiene una edad madurativa de cuatro años, toma un medicamento esencial para seguir viviendo, que podría afectar el desarrollo del feto" aseveró el letrado.
Luego del planteo en la Justicia, el juez de Familia Germán Ferrer, sobre quien recayó la causa, aseguró que "no voy a contradecir la resolución de la Corte bonaerense", que recientemente autorizó un aborto en un caso similar.
"Creo que el pedido no era necesario, porque esto no requiere autorización judicial. Los directivos del hospital tendrían que aprobar el aborto porque el Código Penal lo autoriza", sostuvo.
En ese sentido, agregó que "no estoy al tanto de por qué los médicos no han aceptado. Si ellos no entienden la solicitud de la madre, es un problema médico", explicó el magistrado.
La chica discapacitada habría sido abusada sexualmente "en una escuela diferencial" de la localidad de Maipú, en Mendoza, según los abogados de la familia, y la denuncia por este delito fue radicada el 8 de agosto pasado en la Unidad Fiscal de esa ciudad.
El caso está siendo investigada por el fiscal de Instrucción Hernán Ríos.
Fuentes ligadas a la fiscalía explicaron que todavía no se ha determinado el lugar donde fue ultrajada ni quién lo hizo.
El abogado Vega precisó que desde los cuatro años la joven necesita una fuerte medicación para no estar postrada en una cama.
"Como nació con problemas cerebrales, sino toma el remedio podría caer en un estado vegetativo", señaló Vega.
La madre de la chica, quien vive sola con su hija porque su esposo falleció hace varios años, detectó a finales de mayo pasado, que tenía un retraso en el ciclo menstrual por lo que consultó con un ginecólogo y se determinó que la joven estaba embarazada.
La mujer, de inmediato, sospechó que se trataba de una violación y presentó la denuncia en la fiscalía de Maipú.
El fiscal ordenó al Cuerpo Médico Forense que realizara estudios a la chica para precisar qué tipo de abuso sufrió, ya que, de confirmarse el estado de gravidez de la discapacitada, aunque la relación sexual haya sido con su consentimiento, se demostraría indefectiblemente que existió un delito.
El resultado de estos análisis todavía no había llegado hoy al despacho del magistrado.
Luego de la denuncia, el jueves 10 los abogados, la madre y la joven se presentaron en el Hospital Militar para que le practiquen un aborto, "pero nos pidieron tiempo para analizar el tema", sostuvo Vega.
Por eso decidieron acudir la Justicia con una acción "autosatisfactiva", es decir, un recurso que atiende los casos urgentes.
Fuente: DYN
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