"Me ha llegado por escrito que (Manuel, el máximo jefe guerrillero) Marulanda ha ordenado que se tome la prueba de fe de vida. No sólo de Ingrid sino de los demás retenidos por las FARC, ese pudiera ser un avance", afirmó el mandatario, puntualizó la Agencia Bolivariana de Noticias (ABN).

El presidente venezolano intenta un acercamiento entre el gobierno y la guerrilla colombianos para alcanzar un canje humanitario entre rehenes de la insurgencia y jefes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), gestión que cuenta con la aprobación de su colega Alvaro Uribe.

A través de la televisora estatal, Chávez aseguró que el tema humanitario es el principal punto de las reuniones que sostendrá con delegados de las FARC en algún punto de Venezuela posiblemente hoy.

Al respecto, la cadena Caracol Radio aseguró en su portal de Internet que hasta esta mañana esa reunión no se había realizado.

El jefe del Estado bolivariano reiteró además que se encuentra en el país un enviado del presidente francés Nicolás Sarkozy, especialmente interesado en la liberación de Betancourt, nacida en Francia y con nacionalidad colombiana.

Reconoció que el gran impedimento para la negociación es que el gobierno y la guerrilla logren acordar respecto de las condiciones del intercambio de prisioneros, ya que la guerrila pretende que se se haga el despeje militar de dos provincias y el gobierno se niega a cumplir ese reclamo.

"Las Farc exigen para el acuerdo humanitario el despeje militar de dos provincias, Pradera y Florida; el gobierno dice que no, que no habrá despeje. Ese es un inamovible", refirió.

Añadió que "otro inamovible es el intercambio de prisioneros, el canje. El gobierno dice que no va a permitir que los guerrilleros presos vuelvan a la montaña; la guerrilla exige que se los devuelvan".

"Vamos a aproximarnos a un tema que es bastante difícil, pero con todo el ánimo de ayudar, ojalá, al canje humanitario", expresó Chávez, según reproduce hoy el diario bogotano El Tiempo en su edición on line.