Durante una entrevista radial, el delegado puso a su gremio "a disposición para construir el subte" porque, según dijo, quiere que "le vaya bien a Macri, pero también quiero que le vaya bien a los pasajeros y a los trabajadores". No obstante se manifestó "muy preocupados porque se está hablando del aumento del pasaje sin argumentar por qué" y al respecto se preguntó "¿cómo vamos a aumentar si no tenemos trenes? En las horas pico la gente viaja como ganado".

Por este motivo, enfatizó el hecho de que ese servicio de transporte haya pasado a la órbita porteña, no significa que "cualquier decisión que deba tomar Macri" sea "arbitraria" y por ello dejó claro que, en materia de sueldos, "vamos a tener una negociación con el gobierno de la Ciudad", pues "no le queda otra".

No obstante, precisó que todavía "no se ha votado en asambleas" el porcentaje de incremento que se reclamará, pero estimó que "como mínimo tenemos que empezar a hablar del 30 por ciento, en base a la inflación. Hoy la canasta familiar está muy alta, todas las cosas están muy caras". "Queremos tener una mesa de diálogo: que el jubilado viaje todo el día gratis, no tenga limitados los horarios, que los docentes tengan un pasaje diferenciado, y que tengamos más coches y más comodidad en los subtes", agregó.

Por su parte, Grindetti explicó que "hoy lo que estamos acordando con el Gobierno nacional es que la ciudad toma la responsabilidad de la fiscalización y el funcionamiento del subte y a partir de ahora se abre un camino de letra chica que es la transferencia definitiva del contrato de concesión”.

El funcionario de Mauricio Macri dijo que en el traspaso “el Gobierno nacional hace un aporte de 360 millones de pesos único y definitivo como subsidio al subte”. Aclaró, así, que “como esto incide en el presupuesto de la ciudad, ya que no contemplaba el traspaso porque fue envidado antes, vamos a estar verificando adónde podemos recortar algún gasto y a partir de ahí definiremos una tarifa y lo comunicaremos en las próximas semanas”.