La Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata dio marcha atrás con el nuevo plan que incluía un curso de apoyo destinado a los aspirantes que fueran reprobados en el examen de ingreso, aunque ratificaron que los aspirantes que no logren la calificación para ingresar a la carrera podrán optar por alguna de las carreras que se dictan en la Escuela de Recursos Humanos, como Enfermería, Obstetricia, Fonoaudiología o Instrumentación Quirúrgica. “No están dadas las condiciones por razones de infraestructura y presupuestarias”, fue el planteo que realizó el Consejo Directivo de la unidad académica al Consejo Superior, dejando en claro que la medida era tomada por un tironeo presupuestario con la casa de estudios. El decano de Medicina, Jorge Martínez, aseguró ayer que habían propuesto “un acercamiento para darles clases de refuerzo a los estudiantes y que no tuvieran que asistir a un instituto privado. La Universidad se había comprometido a conseguir aulas y presupuesto, pero hacer el curso con las modificaciones pedidas no es posible y menos si no hay fondos como dijeron que nos iban a destinar”. Diez días atrás el órgano máximo de gobierno de la entidad platense se reunió para debatir el ingreso a Medicina y resolvió que las autoridades debían adecuar su propuesta a la letra del Estatuto reformado el año pasado que dispone en su artículo 20 que “el ingreso es de carácter libre e irrestricto”, emplazando a la facultad para que modifique el curso de apoyo, introduzca una evaluación a fin de año y realice cambios al plan de estudios inicial de la facultad, ya que originariamente la idea era preparar a los 742 alumnos desaprobados de los más de mil inscriptos este año de cara a las pruebas de admisión de 2010. Por ello Martínez afirmó que la “política de admisibilidad no tiene cambios porque estamos avalados por la Ley de Educación Superior y por la Corte Suprema de Justicia”, recordando el litigio por las diferencias entre la facultad y el Consejo Superior de la universidad platense. La Ley sancionada en 1995 establece que las facultades de universidades con más de cincuenta mil estudiantes pueden diseñar sus sistemas de ingreso, y Medicina cuenta con más de noventa mil alumnos, por lo que la unidad académica impuso un examen de ingreso que consiste en sesenta preguntas sobre matemática, biología, química y física. El mínimo puntaje para ingresar es aprobar al menos cuarenta. El vicepresidente de la UNLP, Raúl Perdomo, admitió que estaban “frente a una situación inédita” debido a que “Ciencias Médicas está desobedeciendo una disposición del Consejo” y adelantó que estaban “evaluando cómo está el escenario y qué decisión vamos a adoptar”.