La negociación salarial entre el Ministerio de Educación y los docentes universitarios continúa complicada. Al paro que cumplieron durante esta semana los sindicatos enrolados en la Conadu Histórica (CTA disidente), podrían sumarse medidas de fuerza convocadas por las demás federaciones gremiales del sector. La última oferta presentada por Educación fue rechazada por todos los gremios: un aumento del 28,7 por ciento en dos cuotas acumulativas, a pagar con los sueldos de julio (16,5) y agosto (10,5). Los sindicatos piden incrementos de entre el 30 y el 44 por ciento, según los casos.

El porcentaje ofrecido por el ministerio en las paritarias es el mismo que había presentado la semana pasada, pero en la reunión realizada anteayer, en el Palacio Sarmiento, el secretario de Políticas Universitarias, Aldo Caballero, redujo a dos las tres cuotas previstas inicialmente. Tras la negativa de los dirigentes sindicales a cerrar el acuerdo, la negociación pasó a cuarto intermedio, hasta el lunes próximo.

Por el conflicto salarial, la Conadu Histórica ya había convocado diversas medidas de fuerza en los últimos meses y durante toda esta semana organizó un paro nacional, que afectó especialmente a las universidades de Tucumán, Catamarca, Cuyo, Comahue, Jujuy, Sur, Patagonia San Juan Bosco, el Litoral, Rosario, San Luis, Córdoba y algunas facultades de la UBA (sobre todo, Ciencias Sociales, Filosofía y Letras, Psicología), entre otras unidades académicas. También Fagdut, la federación de los docentes de la UTN, hizo un paro de 24 horas el martes pasado.

La secretaria adjunta de Conadu Histórica, Claudia Baigorria, consideró que la reducción de las cuotas en la oferta oficial no cambia el escenario: “Para nosotros sigue siendo un ofrecimiento indigno para lo que es nuestra situación salarial, y a la altura del año ya estamos pagando los costos del ajuste”, dijo. Los delegados de la federación harán un congreso extraordinario “en una carpa frente al Ministerio de Educación” el lunes, donde analizarán la continuidad de las medidas.

Ahora anunciaron que podrían sumarse al conflicto las otras federaciones sindicales, Conadu (CTA) y Fedun (CGT), que prevén parar el miércoles si la propuesta de Educación no es mejorada el lunes. Daniel Ricci, titular de Fedun, reclamó que la primera cuota del aumento “sea retroactiva a junio”, que se aplique una recomposición del nomenclador salarial y que se ponga en marcha el plan de jerarquización docente previsto en el Convenio Colectivo de Trabajo (ya acordado pero aún sin aprobación formal), que prevé un 25 por ciento de incremento en cinco años.

“Si el lunes no aparece lo que falta, va a haber huelga”, advirtió Pedro Sanllorenti, secretario general de Conadu, para quien la propuesta de Educación fue “insatisfactoria” porque “no incluye mejoras salariales a través del nomenclador; no paga la jerarquización docente contemplada en el convenio colectivo y tampoco se producirá cobro alguno en junio”.