Las universidades volvieron a advertir sobre los problemas económicos y financieros que tendrán este año, aun cuando el presupuesto previsto repetiría los fondos del 2001. “El monto que se asignará a las universidades nacionales provocará, sin dudas, serias dificultades para desarrollar con normalidad el calendario de actividades académicas”, avisó el rector de la Universidad del Litoral, el radical Mario Barletta.
Cuando aún falta la aprobación del Senado para que el presupuesto nacional sea ley, la Cámara de Diputados ya dio media sanción al proyecto enviado por el Gobierno, que incluye 1797 millones de pesos para las instituciones universitarias. El año pasado los fondos presupuestados fueron prácticamente los mismos, pero nunca se terminaron de ejecutar.
“La insuficiencia del monto asignado a las universidades, el no cumplimiento por parte del Ejecutivo Nacional del envío de las partidas tal cual han sido aprobadas por el Congreso, y el problema financiero que se genera, porque además nos envían los fondos con retraso.” Así describió Barletta a las causas de la crisis que atraviesan las casas de estudios nacionales.
A su vez, el Consejo Superior de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) declaró a la institución en “emergencia universitaria” y en “estado de alerta permanente”. Repudió “los recortes presupuestarios sucesivos que se han venido aplicando en los últimos años, y que se pretenden continuar en los futuros presupuestos poniendo en peligro el funcionamiento y normal desempeño de las facultades regionales y unidades académicas”. El órgano de gobierno de la UTN también reclamó “el inmediato pago de las deudas contraídas por parte del Gobierno Nacional, correspondientes a ejercicios anteriores al año 2002”.