El movimiento estudiantil universitario definirá su nueva conducción y el contenido político que lo guiará en los próximos dos años. Más de ocho mil estudiantes de todo el país se reunirán mañana y pasado en el XXII Congreso de la Federación Universitaria Argentina (FUA), que se hará en la ciudad de Córdoba. Pese a la caída de su caudal electoral, todo indica que Franja Morada conservará la conducción de la federación, ya que aún sigue siendo la primera fuerza entre los universitarios. Para ganarle, todas las agrupaciones opositoras, de izquierda e independientes deberían sumarse en un frente común. Y aún así les resultaría difícil.
Del congreso participarán unos 950 delegados de las 35 federaciones estudiantiles regionales. Si bien hasta anoche no estaban computados los números que les corresponderán a las diferentes agrupaciones, se calculaba que Franja tendrá cerca de 400 delegados. El segundo lugar lo disputarán los bloques que encabezan la Juventud Peronista (JUP), el Movimiento Nacional Reformista (MNR), la Corriente Estudiantil Popular Antiimperialista (CEPA) y la Venceremos: cada uno reuniría entre 90 y 120 delegados. Más atrás se ubicarían el PO y el MST, y luego las diversas listas independientes.
El candidato de Franja para reemplazar a Manuel Terrádez en la presidencia de la federación es Emiliano Yacobitti, ex titular del centro de estudiantes de Ciencias Económicas (UBA). Hasta el año pasado, el nombre propuesto para el cargo por la agrupación radical era el de Nicolás Simone, otro miembro de la Franja porteña. Pero fue bajado de la candidatura cuando se reveló que estaba implicado en el cobro de Planes Nuevos Roles Laborales por parte de militantes universitarios de la UBA.
Después del fracaso que sufrió a fines del 2001 en varias facultades de la UBA y de la Universidad de La Plata, y tras mantener su caudal en muchas regionales del interior, Franja Morada “realizó una profunda autocrítica” en su reciente congreso nacional, según dijo su secretario general, Hernán Rossi. “Hubo un nivel de sinceramiento muy fuerte. En los últimos años fuimos abandonando cuestiones que hacen al modelo reformista. Se confió en el apoyo estudiantil y se relajaron muchos debates que antes estaban presentes”, explicó. Además de resolver “dar una batalla final hacia adentro de la UCR”, los militantes morados decidieron impulsar “una trasformación de la agrupación” y “prescindir de las líneas internas del partido”. Pensando en la FUA, Rossi apuntó que “hay margen para marchar hacia un modelo de unidad del movimiento estudiantil y la Franja debe cumplir un rol importante en ese proceso”. En el mismo sentido, Yacobitti precisó: “Vamos al congreso de FUA con la idea de abrir un debate para, en base al consenso, armar una salida política organizada a este modelo de país. Y vamos a denunciar que el movimiento estudiantil no se ve reflejado en un gobierno que no tiene representatividad política”.
Esta vez, los estudiantes radicales no tendrán aliados de peso en la FUA, como mientras duró la Alianza universitaria. “El MNR se va a presentar solo. Vamos a sumar a algunas agrupaciones independientes y otras que integraron el Frente Grande, pero nada más”, definió Raúl Sánchez, secretario general del MNR. “Hay que refundar la FUA, hacerla de vuelta –siguió Sánchez–. O el movimiento estudiantil se pone a la altura de las circunstancias que vive el país y sale a la calle, o desaparece. Si no lo hacemos, vamos a terminar como la CGT de los gordos.”
El dilema de la izquierda y los independientes repetirá el de los últimos congresos. ¿Se aliarán o no? Si lo hacen, ¿quién y cómo encabezará? “La situación está como para jugar a arrebatarle la FUA a la Franja con un gran frente estudiantil –opinó Rodolfo Kempf (CEPA)–. En diciembre se abrió un camino liberador para el país y para el movimiento estudiantil. Si nos juntamos con la Venceremos y los independientes, y coordinamos una conducción compartida, podemos ganar. Si no, la oposición se va a atomizar.” La apertura del congreso será mañana, a las 19, en el estadio abierto del club General Paz Juniors, y seguirá el sábado, desde las 10, en la Universidad de Córdoba.