Vuelve
a convertirse en el �niño mimado� de los financistas
México,
de cuco a vedette
A
cinco años del tequilazo, está a un paso de ser calificado por las
consultoras de riesgo como país �Investment grade�, algo que la
Argentina, si todo marcha bien, lograría recién en cuatro años.
La noticia sorprendió a los financistas de la City. Moody�s, una
de las agencias de calificaciones internacionales más respetadas
por los inversores, puso en revisión la nota asignada a México,
dejando las puertas abiertas para una inminente elevación. Cuando
ese paso se concrete, no más allá de junio, la economía mexicana
recibirá la nota más codiciada por los gobiernos, la de �grado de
inversión� (Investment grade), que denota un país seguro y atractivo
para los fondos de inversión internacionales. México pasó de cuco
a vedette en apenas cinco años, y hoy vuelve a ser el niño mimado
de los financistas. Todo lo contrario de lo que sucede con la Argentina,
que tiene una calificación que está cuatro escalones abajo de la
óptima. A fines del �94, México devaluó su moneda y se sumergió
en una crisis profunda que tuvo una fuerte repercusión en la Argentina.
A partir de entonces, dejó de ser tomado como el país modelo de
la región y empezó a ser visto como el mal alumno. �La Argentina
no es México�, repetía una y otra vez por aquellos turbulentos días
el entonces ministro Domingo Cavallo en cada foro internacional
que visitaba. Eran otros tiempos. Efectivamente, el Plan de Convertibilidad
vivía su etapa de plenitud y, para convencer a los financistas,
Cavallo mostraba que su programa era el óptimo: pulcritud fiscal
y altas tasas de crecimiento. Todo un modelo. Los inversores creyeron
en el plan, y la Convertibilidad no sufrió modificaciones. Pero
ese escenario mutó. Un lustro más tarde, México ganó en competitividad
dejando su moneda flotar frente al dólar, superó la crisis y se
volvió confiable para los inversores internacionales. Al contrario
de la Argentina, y aun con una inflación del 12 por ciento, su Producto
Bruto se expandió un 3,8 por ciento el año pasado y se prevé un
crecimiento del 4,5 para el 2000. Sus exportaciones crecen año tras
año y la Bolsa se encuentra en niveles record: sólo durante el �99
mostró un aumento del 80 por ciento, contra un 28 que subió el índice
de acciones líderes MerVal. Su asociación comercial con Estados
Unidos y Canadá le juega a favor, convirtiéndose en un verdadero
furgón de la locomotora estadounidense. Tan es así que logra financiar
parte de su déficit de cuenta corriente gracias al fuerte ingreso
de capitales extranjeros bajo la forma de inversiones directas no
especulativas. En ese escenario, México se encuentra a un paso de
ingresar al selecto club de países con calificación de �grado de
inversión�. Esta posibilidad potenciará la llegada de capitales,
en especial de aquellos poderosos fondos internacionales que sólo
invierten en los mercados más seguros del mundo. Mientras tanto,
y a duras penas, la Argentina puja por salir de la recesión, el
sistema de convertibilidad genera dudas entre los financistas del
exterior, y observa a México desde abajo. Sólo en caso de que José
Luis Machinea logre un boom en la economía podrá soñarse con alcanzar
ese lugar preferencial... Dentro de tres o cuatro años.
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