Quisiera saber si se habla algo respecto de la fumigación con herbicidas –probablemente el maldito glifosato– a lo largo de las vías del tren –por mi parte, conozco los recorridos de la línea Mitre (Mitre-Retiro y Suárez-Retiro) y Roca (Constitución-Ezeiza). Los costados de las vías eran –creo recordar que hasta no muchos meses atrás– espacios verdes, llenos de arbustos y pasto. Actualmente, se ve sólo la tierra pelada y las osamentas de los árboles y arbustos que crecían allí. Evidentemente se está fumigando con algún herbicida –si llegara a ser glifosato, ya conocemos su toxicología: se debe fumigar como mínimo a 500 metros de distancia de lugares habitados–. Y bien: ¿cuántas casas dan con sus fondos –y muchas veces, ventanas– a las vías del tren? Esto es un atentado contra la salud pública. Además, los terraplenes, sin el sostén del pasto, se derrumban. Ni hablar de la depresión, de la tristeza que causa ver la tierra muerta y pelada. ¿Alguien puede hacer algo para evitar esta locura? ¿Por qué el Estado prefiere invertir el dinero público en envenenarnos la salud y la moral en vez de llevar a cabo un correcto mantenimiento de los espacios verdes? ¿Se podría investigar al respecto?

Cecilia Fracchia

DNI 27.024.067