Pasaba la derrota por la mínima diferencia ante All Boys en su visita a Floresta y River consumía una nueva frustración en los resultados. El horizonte vislumbraba el superclásico con Boca en casa y el panorama se complicaba más, a partir de la salida de Angel Cappa como entrenador. Sin DT a la vista, el presidente del club, Daniel Passarella, recurrió a lo que tenía a mano. Y así surgió el nombre de Juan José López, que de coordinar las Divisiones Inferiores pasará, el próximo martes, a sentarse en el banco de suplentes para comandar los destinos del plantel de Núñez.

Ante el desafío complicado, el nuevo interino no se amilana: “El equipo tiene que ser protagonista e ir a buscar el partido. Es una final, somos locales y tenemos que ganar, no hay otro resultado que una victoria”, sentenció López.

Para el entrenador será “un sueño” dirigir la Primera División de River, pues es un viejo conocido que vistió la camiseta del club y lo demuestra a la hora de hablar del compromiso futuro que le tocará vivir. “Es un partido más que especial, que necesitamos ganar para recuperarnos y que sea un despegue de cara al final del campeonato”, apuntó.

Será un encuentro fundamental, pues quizá sea el único que lo tenga al mando del plantel, ya que ayer, luego de la segunda práctica ante el plantel, explicó que Passarella le comunicó que solamente dirigirá “hasta el superclásico”, porque no llegaban a tiempo para encontrar a un nuevo cuerpo técnico.

“Con el presidente siempre tuvimos un diálogo frontal. Antes de que arreglara Cappa estuve dos días al frente del plantel y ahora, como todavía no se encontró un reemplazante, me pidió que me hiciera cargo del grupo con (Ubaldo) Fillol y (Héctor) Pitarch hasta el partido con Boca”, indicó el ex volante derecho.

Pero más allá del límite que le impone el calendario deportivo, con Boca como único horizonte, López sacó a relucir su sensación. “Estoy feliz por esta oportunidad que nunca había soñado, y la idea es sumar en este momento difícil y revertirlo. No pienso en qué puede pasar después de Boca, sólo quiero ganar esta final contra el rival de toda la vida”, añadió. Es que, ante todo, el DT interino tiene una idea fija que venía desandando hasta el momento de recalar en el banco del River profesional: “Hay un proyecto de Inferiores que se debe continuar”.

El panorama en su cabeza con respecto a la semana pasada es diferente y ya se pone en la piel del conductor del elenco de Núñez. “Tengo pensado hacer cambios. Va a ser un equipo protagonista que buscará ganar y no especular”, enfatizó López. Y continuó: “Hay que tomar los recaudos necesarios, porque el que se descuida, pierde. La idea es jugar para ganar”.

Ese es su objetivo más allá de su paso con la camiseta de Boca. “No me molesta ese pasado. A veces en la vida hay que tomar decisiones que pueden estar equivocadas o no. Lo que sí sé es que siempre fui de River y que amo este club”, aseguró. Y por eso quiere ganar. Esa es su prioridad desde que sabe que es el entrenador de River, al menos por el superclásico.