DEPORTES
Paysandú, el rival que en el Amazonas espera a Boca
Es el campeón de uno de los estados más pobres del Brasil y hace su debut internacional en esta Copa. Pero está invicto, hizo 13 goles en cinco partidos y ya palpitan el partido con el equipo argentino.
Por Ariel Greco
Boca mantiene su ilusión de pelear por la Copa Libertadores, pero el camino que deberá recorrer es muy diferente al que se imaginaron Carlos Bianchi, sus jugadores y los hinchas después de arrancar el torneo con tres victorias consecutivas. Luego de los descuidos que le costaron perder en Medellín con Independiente sobre la hora, no derrotar a Colo Colo tras ir ganando 2-0 y no alcanzarle con la reacción en los últimos diez minutos ante Barcelona en Ecuador, ahora Boca se encontrará con un rival brasileño mucho antes de lo previsto. Al finalizar segundo en su grupo, el campeón de las ediciones 2000 y 2001 deberá definir su pasaje a cuartos de final frente a Paysandú, la gran revelación de la Copa, a orillas del Amazonas. Un rival sin la experiencia de los dirigidos por Bianchi, pero bastante temible si se toman en cuenta los antecendentes en lo que va del certamen. Cuando comenzó la Copa Libertadores, la prensa brasileña descreía de las posibilidades del Paysandú de pasar a la segunda fase. Es que con la base del conjunto que logró el ascenso a la primera división en 2001 muy pocos consideraban las chances del “Papao”, debutante absoluto a nivel internacional. Sin embargo, no tuvo problemas en vencer en Lima 2-0 a Sporting Cristal y golear 6-2 a Cerro Porteño en Asunción para adjudicarse su grupo una fecha antes del cierre. En los cinco partidos que disputó, el conjunto paraense sólo empató como local 0-0 ante Cerro Porteño. El resto fueron todas victorias, con lo que logró 13 puntos, con 13 goles a favor y 4 en contra. El martes culminará su participación Grupo 2 cuando visite a la ya eliminada Universidad Católica en Santiago.
Fundado en 1914 en Belem, capital del estado amazónico de Pará, uno de los más pobres de Brasil, el Paysandú está considerado el club más grande de la región norte de Brasil. “A maior torcida do norte”, se enorgullece su propia hinchada. Su estadio es el Leonidas Castro, con capacidad para 15 mil personas, pero durante la Copa juega de local en el Mangueirao, donde en sus tres partidos promedió casi 45 mil espectadores. Desde 1920, cuando ganó por primera vez el campeonato paraense, hasta ahora, el conjunto blanquiazul obtuvo cuarenta títulos estaduales, incluidos la trilogía 2000, 2001 y 2002. Eso le permite constituirse en el club más ganador de Pará.
Además obtuvo dos torneos de la segunda división del Brasileirao (1991 y 2001), lo que le dio el derecho de participar en primera. El año pasado se quedó con la Copa Norte y, de esa manera, se ganó su lugar en la Copa de Campeones. Allí, en un certamen que reunió a los diferentes monarcas regionales, Paysandú sorprendió al superar a Palmeiras, Cruzeiro y Corinthians, entre otros, para ganar el título. Como premio se adjudicó un boleto para la Libertadores, un sueño para los torcedores poco acostumbrados a codearse con los grandes del continente. La historia es bastante similar a la del Sao Caetano, que casi de la nada llegó a la final del año pasado ante Olimpia.
La máxima figura de Paysandú es Robson, un potente delantero de 1,85 metro y 82 kilos, que con seis tantos es el máximo goleador de la Copa. Lo curioso es que Robson recién explotó en las últimas temporadas, pese a que está a punto de cumplir 33 años y acredita un pasado por Botafogo, Internacional de Porto Alegre y Bahía, entre otros equipos. Su compañero de ataque varía entre Balao, que también puede jugar en la mitad de la cancha, Iarley y Ze Augusto, un jugador muy querido a partir de los goles que anotó en el tricampeonato estadual.
Si bien hasta ahora se mostró como un equipo muy compacto en todas sus líneas, el mediocampo es su punto fuerte. Allí alternan Sandro Junior, Vanderson, Lecheva, Velber y Jóbson, todos jugadores de buena técnica, pero que también se muestran combativos. Esa es la filosofía de su entrenador, Darío Pereyra, un uruguayo de extensa trayectoria como técnico en Brasil, que llegó este año para hacerse cargo del conjunto paraense. Desde entonces impuso su esquema clásico 4-4-2 que le dio muy buenos resultados en la Copa. Además, en el torneo local está encaramado entrelos punteros luego de empatar en la primera jornada y derrotar nada menos que a Santos, el último campeón brasileño y el gran cuco de la Libertadores, en la segunda.
Metido en semejante aventura, para Paysandú el objetivo primario ya está cumplido y todo lo que venga a partir de acá será un regalo. Sin embargo, los pergaminos de su rival no lo intimidan. En la página oficial del club se anuncia, desafiante: “Ahora que se venga Boca”.