DEPORTES › EL PRESIDENTE DE RIVER APOYO A MANUEL PELLEGRINI
Respaldo al borde del abismo
Aguilar estuvo en el entrenamiento, pero si pierden el domingo contra Boca y el entrenador renuncia no habrá marcha atrás.
El presidente de River, José María Aguilar, y algunos de sus pares de Comisión Directiva aparecieron sorpresivamente por la práctica para apoyar al entrenador Manuel Pellegrini, a su cuerpo técnico y al plantel, golpeados por la dura eliminación de la Copa Libertadores y a la vez obligados a levantar el ánimo para enfrentarse con Boca el domingo en la Bombonera. Siguieron circulando los rumores por la posible despedida del chileno en caso de una derrota en el superclásico.
Aguilar y los dirigentes Mario Israel y Antonio Larregina mantuvieron una reunión informal con el cuerpo técnico y los jugadores en la que les brindaron su apoyo. “Estamos golpeados como todos –confesó el presidente–. Vinimos a dar el saludo y el respaldo de siempre y a advertir que estamos ante una instancia en la que nos jugamos muchas cosas en la pelea por el campeonato”, subrayó.
“Quedan seis fechas por jugar y hay mucho por definir –insistió Aguilar–. Estoy dolorido y golpeado después de la gran desilusión que sufrimos, pero hay que mirar para adelante.”
Los dirigentes habrían concurrido al predio que el club posee en Ezeiza para respaldar especialmente a Pellegrini, quien –según algunos rumores– podría presentar su renuncia en caso de perder frente a Boca. En ese caso, la dirigencia no descartaría aceptarla.
Sin embargo, también se sostiene en el club que el técnico chileno está dispuesto a seguir en su cargo hasta la finalización del presente torneo Clausura al margen de los resultados. Incluso, una versión circulante ayer señalaba que si River termina ganando el certamen doméstico, la intención de Aguilar y compañía sería renovar el vínculo con el ingeniero.
“El futuro de Pellegrini siempre depende de él –manifestó Aguilar–. Su vínculo con el club vence el 31 de mayo, pero tiene una prórroga natural por el transcurso de la competencia.”
La temprana eliminación de la Libertadores privó al chileno de gozar de una prórroga automática y efectiva en el contrato, por lo que una eventual caída ante Boca, un día después del vencimiento de su relación contractual con el club, podría ponerlo fuera de juego antes de lo previsto.
Esteban Fuertes admitió que la eliminación “pegó muy duro” en el ánimo del plantel, pero aseguró que el superclásico “es el mejor partido que nos pudo haber tocado” para recuperar la confianza. “Obviamente hay autocrítica y seguro que todos cometimos errores, tenemos que buscar los errores más grandes y solucionarlos, pero también pensar en lo positivo porque en los últimos partidos no veníamos tan mal –reflexionó el atacante–. Ahora hay que demostrar que el equipo está fuerte y no se derrumbó.”
Eduardo Coudet opinó que “por supuesto el clima no es el ideal, pero sabemos que tenemos que llegar bien al partido del domingo. No hay que reivindicarse de nada. El tema de la Copa, por lo menos en lo personal, es una herida que va a tratar de cerrarse porque estábamos en el momento ideal. La desilusión es muy grande”, agregó.
“Se rompió la ilusión de todos –aceptó el volante–. La gente se estaba identificando con nosotros porque veía un equipo fuerte. Estuvimos desconcentrados un par de minutos donde ellos hicieron la diferencia. Después fuimos a buscarlos y no llegamos al gol para ir a los penales.”