Arsenal tuvo todo para ganar, la iniciativa durante el partido y un rival que jugó setenta minutos con un hombre menos, sin embargo no supo aprovecharlo y debió conformarse con un deslucido empate sin goles ante Defensa y Justicia. El planteo de Santiago Rondina fue claro, ganarle a Defensa la pelea en la mitad de la cancha y atacar por los costados. Y la cosa le resultó bien al técnico de Arsenal en un noventa por ciento, porque no creó situaciones claras de gol, aunque no pudo concretarlas. Pero en el segundo tiempo, el partido se deslució cuando Defensa puso diez hombres en su campo y Arsenal se cansó de tirar centros, los cuales muy pocas veces exigieron a Santillo y los centrales.