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El arquero colombiano Oscar Córdoba tendría que seguir atajando en Boca Juniors, al conocerse ayer en el club de la Ribera que el Perugia de Italia intenta cambiar la forma de pago del préstamo y ofrece cuotas que se extenderían hasta fines de 2002. La información, conocida ayer a la tarde por fuentes de la comisión directiva boquense, indica que la dirigencia pretende contactarse de inmediato con Córdoba para comunicarle que el pase a ese club quedó sin efecto.
Desde Italia, el administrador delegado del Perugia, Alessandro Gaucci, confirmó el quiebre de la operación aunque dejó una puerta abierta para un acuerdo en una nueva reunión para mañana lunes. La frustración del pase sería un doble golpe. Por un lado, para Boca, que ya contaba con la suma que debía entrarle por el préstamo hasta finalizar la temporada europea y por otro para el arquero, quien había manifestado su deseo de “tener una oportunidad en el fútbol de Europa”.
“No fue cerrado el pase por el pago del préstamo. Cuando el jugador llegó aquí cambiaron un poquito las cosas, como a veces sucede en el fútbol”, dijo Gaucci para una radio argentina. “No hablé directamente con la gente del jugador ni con el jugador mismo, pero la persona que tenía el contacto, que era nuestro asesor letrado, me había hablado de un préstamo hasta el final de la temporada con el que Perugia tenía que pagar una suma por el salario del jugador, pero todo cambió cuando llegaron aquí”, indicó Gaucci.
La frustración del pase de Córdoba al Perugia se da en un momento en que el jugador ya había viajado y la prensa deportiva italiana le dispensaba una entusiasta bienvenida y lo calificaba como “el número uno de América”. Sin embargo, las dificultades en el pase comenzaron a avizorarse al mediodía de ayer por declaraciones del asesor letrado del Perugia, Rocco Dozzini, cuando también en declaraciones radiales aunque sin arrojar precisiones, alertó de que el arribo de Córdoba no era “una llegada oficial, porque el pase no se ha concretado”. “Faltan precisar detalles importantes”, dijo el abogado, quien dejó deslizar las dificultades económicas. “Son los problemas que ocurren cuando se trata de un jugador importante y Perugia no es un club muy grande”, dijo.
Consideró Dozzini que el tema podría destrabarse con la llegada a Italia de algún dirigente boquense. “Sabemos que están tramitando por el ‘Pampa’ Sosa y tal vez podrían llegarse hasta acá por esto”, imaginó.
Todo indica entonces que las valijas del arquero colombiano seguirán en movimiento: Buenos Aires-Bogotá-Buenos Aires-Perugia... Desde fin de la temporada pasada tras “el último partido” ante Independiente, cuando se asoció a la despedida de Carlos Bianchi, no termina de deshacerlas que ya tiene que volver a partir.