La habitual dinámica y actitud de Juan Pablo Sorín sobresalió por encima del discreto desempeño global del equipo de Bielsa; Ortega y Verón tuvieron picos de excelencia, los del fondo cumplieron, Crespo hizo lo suyo cuando le tocó y Claudio López fue el más flojo. En síntesis:
Cavallero: No fue exigido y cuando algún centro perdido cayó sobre el área argentina respondió con solvencia.
Quiroga: Su inclusión como titular fue sorpresiva y su actuación discreta. No se complicó defensivamente, pero tampoco mostró nada que lo destacara.
Ayala: Exhibió su habitual ductilidad para llegar a todas y estuvo siempre atento, sin errores y sin descollar. Nada en ataque.
Samuel: Igual que Ayala, aunque algunas veces debió exigirse más que su compañero de zaga para controlar al entusiasta Takahara. Se dio un para de cocazos y no pesó arriba.
Zanetti: Sin exigencias defensivas, se mandó poco. Mejoró en el segundo, al jugar algo más adentro.
Almeyda: Sin prevalecer en el medio, tampoco se desubicó ni pegó en exceso. Cumplió.
Sorín: El más decidido y entusiasta. Provocó la única acción de riesgo del primer tiempo con un zurdazo al ángulo izquierdo que salvó Narasaki y en el arranque del segundo anotó el primer gol.
Verón: Tuvo precisión, tiró pocos pelotazos y manejó los hilos de su equipo desde el otro lado (jugó por la derecha, cuando habitualmente lo hace por la izquierda), además de iniciar las jugadas de los dos tantos. Puso ganas, se enojó con el árbitro y no tuvo compañía para la corta. Con el esquema de Bielsa su juego se termina tornando previsible.
Ortega: Siempre intentó. El primer tiempo fue fatal: La perdía, siempre pegado a la raya. En el segundo puso las asistencias para Sorín y Crespo y se volvió a apagar.
Crespo: En el primero, no recibió juego. En el segundo se vio algo más y resolvió casi todas bien. Llegó muy bien en el gol.
López: El más flojo. No desbordó, lanzó centros sin precisión y le pegó mal al arco.
C. González: Jugó 26 minutos por el Piojo y pudo hacer el tercero, pero se lo sacó el arquero.
Saviola, Solari y Pochettino: Jugaron un ratito y no influyeron en el trámite.