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Nunca, en la historia de los mundiales, la Selección del país anfitrión quedó eliminada en primera ronda, un dudoso record que puede quedar en manos de los sudafricanos. El entrenador Carlos Parreira duda de ello pese a la derrota ante Uruguay, pero por las dudas se ataja y asegura que, en caso de suceder, no sería “una vergüenza”.

“La clasificación no está perdida –afirmó–. Estamos obligados a vencer a Francia. Tendremos que ser más agresivos. El francés es un equipo muy bueno, pero no es invencible. Estoy seguro de que nuestros hinchas van a continuar apoyándonos, están orgullosos de este equipo”, subrayó. “Pero hay que recordar que este grupo es el más duro, con dos (ex) campeones del mundo. Si no nos clasificamos, no habrá que tener vergüenza. El equipo ha progresado mucho y hace buen fútbol”, afirmó el brasileño.

“No creo que los tres delanteros fueran decisivos, la defensa de Sudáfrica estuvo muy bien. Nos la rompieron con un gol muy bueno de Forlán desde fuera del área, de lo contrario hubiéramos aguantado bien –dijo el entrenador–. Estaba a punto de poner un nuevo delantero y el árbitro marcó el penal y el partido cambió. No vi bien el incidente, pero los jugadores están muy molestos.”

La clave del partido para Parreira fue la experiencia de los uruguayos, superior a la de sus hombres, y que fue decisiva en los momentos importantes del encuentro. “El primer gol de Forlán fue un tiro fantástico desde fuera del área y nuestro arquero no tuvo chances.”