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Desde Rosario

La consagración de Newell’s en el torneo Final fue un trabajo de largo aliento, que comenzó en el 2008, con los socios expulsando a Eduardo López del club con la fuerza del voto, continuó con los dirigentes abocados en la restauración del club, prosiguió con los ídolos regresando para comprometerse en la recuperación de la entidad y concluyó con Gerardo Martino tallando el equipo a gusto, devolviéndole al fútbol argentino el sueño perdido de priorizar el juego por sobre los resultados. En ese recorrido al éxito, a los rojinegros se les encuentran nueve claves que revelan su fenómeno.

- Convicción. “Lo importante es ganar algo de la manera que lo viene buscando el equipo, jugando bien, tratando de ser protagonistas, marcando una forma de jugar que no se negocia”, aseveró Gerardo Martino, en casi una declaración de principios, en entrevista con Página/12. El Tata llegó con una idea al club y la defendió en todas las circunstancias. No hubo derrota ni crítica que lo apartara de sus máximas. Y su consecuente trabajo logró la rápida adhesión de los jugadores.

- El juego. Newell’s sorprendió al fútbol argentino practicando un juego de constante movilidad colectiva y circulación de pelota con precisión que pocos intentan. Lo hizo bien en el Clausura 2012, se superó en el Inicial 2013 y mostró su mejor versión en el Final, adueñándose de registros que la mayoría de los entrenadores desdeñan: Newell’s es el equipo que más pases da y menos faltas comete. Sus goles más característicos tienen al arquero Nahuel Guzmán dando el primer toque, como el tanto de Milton Casco que abrió la victoria del domingo ante Rafaela.

- El arquero. Lo más curioso de Newell’s está en su arquero, que generalmente es figura, pero no básicamente por sus atajadas, sino por su constante participación en el juego, dando pases por abajo orientando a todo el equipo en la salida. En el partido con Boca, por la Copa Libertadores, jugado en el Parque Independencia, Guzmán dio más pases que la mayoría de los jugadores visitantes, dato que prueba su protagónico con los pies.

- El cinco. Hernán Villalba, primero, y Lucas Bernardi, después, son dos jugadores relevantes en el equipo. El primero, ahora de baja por lesión, hace el sacrificio más grande en los pocos momentos que Newell’s no tiene la pelota para lograr su recuperación. El segundo, capitán y líder, se suma al juego de pases con una pegada tan precisa que lidera la tabla de asistencias.

- El goleador. No hay campeón sin goleador. Pero Ignacio Scocco (foto) también rompe el molde de las generales. Regresó sin que nadie lo viera y rompió redes con 24 goles en la temporada (sin contar la Copa Libertadores), y la mayoría de ellos de excepcional definición. Scocco llegó a la Selección con Alejandro Sabella con tantos que pueden salir con derechazos desde 30 metros al ángulo, en corridas con gambetas que hacen delirar a los hinchas o en maniobras de un solo movimiento para sacarse la marca y rematar.

- Los refuerzos. Martino pensó en los refuerzos para la temporada que comenzó en agosto de 2012 los primeros días del pasado año. Mientras la histeria del mercado de pases tiene a la mayoría de los clubes en la puja por los nombres de moda, en enero de 2012 llegaron a Newell’s Milton Casco y Marcos Cáceres, ambos con el pase en su poder, en modesta inversión para la tesorería del club. Se entrenaron durante seis meses junto a Martino y largaron como titulares en el torneo Inicial. Hoy los laterales interpretan la idea del juego con rendimientos destacados.

- Las figuras. Con Martino en el club, las figuras de cuna leprosa con presente en Europa pegaron la vuelta para sacar al club de la última posición del promedio. Maximiliano Rodríguez llegó proveniente de Liverpool de Inglaterra y Gabriel Heinze de la Roma de Italia, ofreciéndole al equipo un salto de calidad. Ambos jugadores resignaron contratos millonarios en el Viejo Continente para sumarse al proyecto del Tata.

- Los números. Newell’s lleva marcados 40 goles, seguido por San Martín de San Juan con 30, que en sólo un partido le anotó seis a Boca. En 37 partidos acumuló 74 puntos, escoltado por Lanús con 66, reunió 21 triunfos, perdió sólo cinco partidos en un año y anotó 63 goles, diez más que los granates.

- El socio. El equipo que se consagró como el mejor de todos en el fútbol argentino y coquetea entre los cuatro mejores de la Libertadores comenzó a formarse el 14 de diciembre de 2008, cuando los socios expulsaron al ex presidente Eduardo López del club, tras 14 años, con la fuerza del voto. Con el socio de vuelta en el club, el presidente Guillermo Lorente se abocó a la reconstrucción de la entidad, recuperando su esencia deportiva en las divisiones inferiores y generando el mejor escenario para lograr la vuelta de los ídolos. Y con los ídolos, el socio y el Tata de regreso, hoy Newell’s es campeón.