Mientras Astrada deshoja la margarita entre la Copa y el Clausura, su antecesor en el cargo, Manuel Pellegrini, encontró una distracción: será el entrenador del Villarreal, colmado de ex boquenses como Juan Román Riquelme, Sebastián Battaglia, Rodolfo Arruabarrena y Fabricio Coloccini, al que ya había dirigido en San Lorenzo. “Desde hace tiempo mi sueño era poder saltar al fútbol europeo, pero tampoco quería hacerlo de una manera alocada sino que esperaba una buena oportunidad y creo que el Villarreal reúne todas las condiciones necesarias”, explicó. “Lo único que quiero es que los jugadores siempre estén motivados y que sea un equipo entretenido de ver, valiente y que juegue un buen fútbol”, agregó.