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La suba escalonada en los activos bursátiles locales de los últimos días se frenó ayer con una fuerte toma de ganancias. Los inversores eligieron asegurarse una renta, mientras se espera por mayores precisiones sobre un acuerdo del gobierno con los holdouts y el Club de París y vendieron aquellos papeles que más habían ganado desde el lunes último. De esta manera, los bonos cayeron 3,5 ciento, mientras que el Merval finalizó con un leve retroceso de 0,2 por ciento. El dólar cerró sin modificaciones en 3,85 pesos para la venta, en casas de cambio y bancos del microcentro.

La toma de ganancias tuvo mayor impacto en los bonos, precisamente por la fuerte recuperación que habían tenido antes. Analistas señalaron que el desempeño estuvo también ligado al recorrido negativo de las principales bolsas extranjeras. Entre los títulos públicos, el más castigado fue el Descuento en pesos, con un desplome de casi 4 por ciento. Otras bajas de importancia fueron el Boden 2014, con el 3,4 por ciento; el Bogar 2018, el 2,4 por ciento y el Boden 2012, 1,8 por ciento.

La Bolsa porteña se alineó con Wall Street, que cayó medio punto porcentual. La rueda de negocios fue más limitada en relación al promedio de las últimas ruedas, un dato que revela la cautela de los operadores. Se operó en papeles privados 53,2 millones de pesos, contra los 77,9 millones de anteayer, cuando subió 2,4 por ciento. Los recortes vinieron por el lado de los bancos.

Entre las noticias corporativas que se conocieron ayer, sobresalió la decisión de San Pablo Alpargatas de comprar las acciones que están en poder de inversores individuales. La compañía brasileña propiedad del grupo Camargo Correa que controla a la textil local, lanzó una oferta pública para la adquisición de acciones de todos los títulos de la empresa que están en el mercado. De concretarse, sería el paso previo para retirar los papeles de los tableros de la Bolsa.