Las distribuidoras provinciales de energía que aumenten sus tarifas verán reducido, en la misma proporción, el subsidio que actualmente reciben del Estado nacional, confirmó ayer el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido. En relación con las distribuidoras metropolitanas, Edenor y Edesur, “están integradas a las actividades de generación y transporte, y consideramos que por tanto sus precios están compensados de modo que pensamos que deben tomar el negocio como una unidad”, afirmó el funcionario, así que descartó que esas empresas necesiten una actualización tarifaria.

El gobierno nacional procura reducir la masa de subsidios dedicados a controlar la tarifa de los servicios públicos. La eventual suba en el precio que pagan los usuarios residenciales a partir de esta política no debería amplificarse por la decisión de las distribuidoras provinciales, que tienen mayor discrecionalidad para manejar las tarifas, según pretende De Vido. Por eso aclaró que una suba de tarifas de esas compañías irá acompañada de una caída de subsidios, de modo que no se modificaría la ecuación final para las firmas.

De Vido participó ayer, junto al vicepresidente Amado Boudou, de la puesta en marcha de la primera turbina de la Central Térmica Ensenada de Barragán, ubicada en esa localidad bonaerense. La planta permitirá incorporar 840 megawatts al sistema de generación eléctrica y demandará una inversión final de 5100 millones de pesos.