El sector de la comercialización espera que el consumo este año esté por encima del registrado durante 2012. “Ya se percibe cierta mejora, como en el caso de electrodomésticos, y todavía no tuvimos el impacto positivo de las paritarias. Además, es un año electoral, que supone una inyección extra de dinero”, argumentó Alberto Guida, de Cadam, entidad que agrupa a los empresarios del rubro mayorista. Desde la consultora Nielsen advierten que en diciembre y enero el consumo mostró un crecimiento del 3 por ciento, apenas por debajo del promedio de 2012, dinámica que podría mantenerse en el año. Resaltaron que el consumo crece en el país a un ritmo similar al registrado en las demás economías de la región, aunque la variación anual de precios sea en la economía local mucho más elevada.

Pablo Pyzyk, analista de Nielsen para la Argentina, indicó que el consumo en 2012 creció 3,3 por ciento, impulsado especialmente por el sector de bebidas. “Eso se explica por las mayores temperaturas registradas en relación con años anteriores, además de que el sector de bebidas fue el que tuvo mayor grado de innovación de productos, con nuevas aguas saborizadas, jugos y gaseosas.” El Indec calculó que el incremento del consumo privado el año pasado fue de 4,4 por ciento. Pyzyk también atribuyó al consumidor argentino un relativamente bajo grado de confianza en la economía local, lo que se tradujo en menor gasto en indumentaria.

También bajó el consumo de las comidas fuera de la casa y a través del delivery. Ese cambio, sin embargo, supone un incremento de las ventas para el comercio de proximidad. También las compras se volvieron más acotadas y se concentraron en unidades más pequeñas. Por eso los analistas advierten que los almacenes incrementaron su porción del mercado, en detrimento de las grandes cadenas de supermercados. En 2012 se inauguraron 116 comercios en el país, de los cuales la mayor parte fueron de superficies reducidas.

Tanto las consultoras como los empresarios del rubro coinciden en que el acuerdo de congelamiento de precios al que llegaron las principales cadenas del sector con el Gobierno no modificó el hábito de los consumidores.