El titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, informó ayer que 308.031 contribuyentes morosos adhirieron al plan de regularización de pagos que concluyó el miércoles, que suman una deuda conjunta de 40.592 millones de pesos. “El 40 por ciento de estas adhesiones se lograron en los últimos tres días y todavía tenemos pendientes 92.283 solicitudes que se terminarán de computar en las próximas horas”, agregó el funcionario. Atribuyó también esa dinámica de ingreso al plan, masiva sobre el final, a la situación que se da en el caso del Cedin y el Baade, instrumentos que todavía no fueron adquiridos con la masividad que se esperaba, aunque faltan dos meses para que ese blanqueo de capitales termine.

Los contribuyentes que adhirieron al plan podrán normalizar su situación con el fisco a través de un plan de pagos de hasta 120 cuotas con un interés mensual de 1,35 por ciento. En la AFIP esperan que, en función de las solicitudes presentadas a último momento, la regularización podría superar incluso los 400 mil contribuyentes. “El comportamiento observado en este tipo de procesos es que sobre el final se hacen las grandes presentaciones”, señaló el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa. “Es una costumbre de la sociedad argentina dejar todo para último momento”, analizó Echegaray, de cara al blanqueo que está en curso.

El 45 por ciento de los 40.592 millones de pesos de regularización corresponden a deudas con el sistema de Seguridad Social, el 53 por ciento a impuestos y casi un 2 por ciento a cuentas impagas con la Aduana. En tanto, el 23,9 por ciento, unos 9697,5 millones de pesos, fueron deudas que presentó la industria manufacturera con la intención de regularizar su pago. El 15,2 por ciento (6100 millones) provino del sector de servicios inmobiliarios, empresariales y de alquiler, mientras que el 14 por ciento (5600 millones de pesos), a comercios al por mayor y menor. Un 11,2 por ciento (4500 millones de pesos) correspondió a empresas relacionadas con los rubros Transporte, Almacenamiento y Comunicación, y el 8,9, al sector de la construcción, entre otros segmentos de la economía.

El plan de facilidades de pago fue lanzado para un universo de más de 1.700.000 contribuyentes morosos con la AFIP. De ese total, el 99,8 por ciento adeudaba hasta un millón de pesos, informó en su momento el organismo recaudador para subrayar que se trataba mayormente de pequeñas y medianas empresas.