ECONOMíA
› RECLAMO DE LAS GENERADORAS POR FALTA DE PAGO
Llegó la factura de la luz
› Por Cledis Candelaresi
El Gobierno afrontará en la próxima semana la disyuntiva de utilizar o no nuevamente fondos del Estado para pagarle a las generadoras eléctricas, subsidiando a Cammesa en alrededor de 60 millones de pesos. La administradora del mercado mayorista tiene un faltante que hasta ayer nadie sabía cómo se iba a cubrir y que podría dar lugar a un pleito adicional con el sector empresario. Este dilema promete repetirse mes a mes mientras las tarifas eléctricas se mantengan congeladas.
La situación es casi idéntica a la que se le planteó el mes pasado a Cammesa, nexo entre la distribución y la generación de energía. Con tarifas congeladas, los pagos de las distribuidoras no alcanzan a cubrir los aumentos en los precios de las generadoras, que no están regulados.
Para compensar esas cíclicas diferencias existe un Fondo de Estabilización. En él se acumulaban recursos cuando estacionalmente el precio de la electricidad de las distribuidoras subía. Pero como el Gobierno no autoriza ajustes estacionales, ese “excedente” no ingresó y aquel pozo se agotó el mes pasado, cuando Cammesa tuvo que liquidar la energía provista en junio por las usinas.
Según precisó a Página/12 el vicepresidente de la Asociación de Generadoras, Fermín Demonte, las dificultades se superaron entonces gracias a que el secretario de Energía, Daniel Cameron, echó mano de otro fondo que administra esa dependencia pública para que las usinas puedan cobrar casi todo, ya que quedó un faltante de 20 millones de pesos. Fue un recurso excepcional y “de entrecasa”, sin muchas formalidades y al que se apeló con discreción. Auxilio que, sin embargo, tanto el Gobierno como las empresas se niegan a admitir como un “subsidio”: para las generadoras, el Estado no hizo más que subsanar el presunto error de congelar las tarifas de las distribuidoras, mientras que para los funcionarios públicos es sólo un “adelanto” que las arcas públicas podrán recuperar cuando el Fondo de Estabilización vuelva a nutrirse.
Pero según figura en la agenda de los generadores, el lunes 8 de septiembre Cammesa tendría que tener liquidado el pago de la energía que las usinas proveyeron en julio. Esto sumaría alrededor de unos 120 millones de pesos, a los que habría que sumarle los 20 que quedaron pendientes el mes pasado. Nuevamente, una grieta en las cuentas de la administradora del mercado mayorista, Cammesa. Según calculan los generadores, los ingresos de ésta apenas alcanzarían para cubrir entre un 40 y el 45 por ciento del monto total.
A diferencia de la distribución de electricidad, la generación no es un servicio público y sus precios no están regulados. Frente a esto, sería más complicado para el Gobierno controlar la situación de una usina que quiera dejar de producir, supuestamente desalentada por las dificultades de cobro y algunos otros inconvenientes adicionales para fijar el precio que ellos consideran genuinamente de mercado. Quizás por esto, el Gobierno vuelva a abrir la mano este mes para saldar la deuda.