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El ministro de Economía, Axel Kicillof, utilizó ayer la red social Twitter para hablar nuevamente de la disputa judicial contra los fondos buitre. “Argentina quiere pagarle al ciento por ciento de los acreedores, pero en condiciones justas, legales, equitativas y sostenibles. Los buitres no quieren negociar, porque para llegar a ese punto tiene que haber dos voluntades. Esta gente trabaja de no aceptar, van a un juez, reclaman todo y toman de rehenes al 93 por ciento que sí apostó por Argentina”, destacó el funcionario, para criticar las maniobras de estos fondos especulativos, que recibieron el fallo favorable de la corte de Nueva York a cargo del juez Thomas Griesa, lo que los habilitó a pedir el pago de una sola vez y en efectivo de bonos que entraron en el default de 2002, tras el colapso de la convertibilidad.

“En una negociación hay dos partes. Los representantes de los buitres dejaron en claro en la oficina de Pollack que son intransigentes”, aseguró el ministro de Economía. A su vez, atacó a los economistas del establishment que recomiendan que Argentina pague sin cuestionamientos. “Los que quieren sobreendeudar de nuevo al país son los que quieren pagarles a los buitres cualquier cosa. Quieren que negociamos de a uno por vez, para que el último se lleve todo”, mencionó.

El funcionario se refirió además al vencimiento de la cláusula RUFO. “Los buitres de afuera y sus secuaces internos decían que la cláusula RUFO era una excusa para no pagar. Pagar bajo RUFO era voltear el canje. Si Argentina pagaba a los buitres lo que pedían, los 1600 pasaban a ser 500.000 millones de dólares. Cometíamos el peor error de nuestra historia financiera. Y, sin embargo, ‘expertos’ y candidatos recomendaban hacerlo”, aseguró.

Kicillof también comentó la visión internacional respecto de la posición del país de no ceder a las extorsiones de los buitres. “El mundo reconoce que Argentina tiene razón al defender sus finanzas, a su pueblo, a su dignidad y a su soberanía ante el ataque de los buitres. De hecho, la posición de Argentina ha logrado que la ONU trabaje en un nuevo marco para las reestructuraciones de deuda soberanas”, apuntó.

Finalmente, hizo una mención del impacto monetario que tendría aceptar los condicionamientos de los fondos especulativos. “Ahora de nuevo nos quieren marcar la cancha. Pero pagar lo que piden es pagar 23.000 millones de dólares al 7 por ciento que no entró al canje, no nada más los 1600 de los buitres. Y los 23.000 son una estimación de Argentina, porque Griesa no termina de decir cuánto es, cuántos son, qué reclaman y en qué condiciones”, cerró. Las cifras que difundió el ministro adquieren relevancia ya que representan cerca del 74 por ciento de las reservas del Banco Central, que rondan los 31.000 millones de dólares.