La empresa Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado tendrá a su cargo la gestión estratégica y la recuperación de las vías para el transporte de carga. La optimización de este sistema para transportar mercaderías a los puertos podría reducir en un 80 por ciento los costos de flete de las economías regionales. La Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) celebró la sanción de la ley que declaró de interés público la recuperación de los ferrocarriles. “La decisión de recuperar para el conjunto de los argentinos el sistema desmantelado durante los años ’90 ratifica la revalorización del papel de un Estado activo tras el fracaso del mito neoliberal”, sostuvo la entidad a través de un comunicado.

La nueva normativa permitirá ampliar el espacio de influencia del sector público en áreas fundamentales al terminar con las concesiones vigentes. Para eso la iniciativa ofrece múltiples formas legales –desafectar bienes, renegociar–, pero lo más probable es que se proceda a reconvenir los contratos para que esas empresas se transformen en operadores. Las compañías privadas seguirán corriendo trenes, pero la planificación de qué, quién, cuándo, cómo y dónde corren los trenes cargueros quedará a cargo de Ferrocarriles Argentinos.

“Los pequeños y medianos empresarios damos fe del profundo daño causado a las cadenas productivas y a las economías regionales por la destrucción del ferrocarril en todo el país, operado por los actores privados en complicidad con los gobiernos de turno”, agregó Apyme.

En la actividad carguera quedan en pie tres privatizadas: Nuevo Central Argentino, compañía perteneciente a Aceitera General Deheza, de la familia Urquía; Ferroexpreso Pampeano, un ramal cerealero a cargo de Techint, que llega a los puertos de Rosario y Bahía Blanca, y Ferrosur, gestionado por la cementera Camargo Correa, de Brasil, desde que adquirió las operaciones de Loma Negra.

El titular de la Cámara de Diputados y precandidato a gobernador bonaerense del Frente para la Victoria, Julián Domínguez, sostuvo que “Ferrocarriles Argentinos es una conquista para todos los argentinos”.

Por su parte, el secretario general de la Unión Ferroviaria, Sergio Sasia, afirmó que la nueva normativa “es un paso trascendental”. “Hay que seguir invirtiendo en la infraestructura de vías, recuperando líneas de pasajeros de larga distancia y darles mucha prioridad a los trenes de carga, tan importantes para las economías regionales y para los pequeños y medianos productores”, reconoció Sasia, y agregó: “Si bien se adquiere material rodante proveniente del exterior, paralelamente hay una recuperación de la industria nacional: ya se están fabricando formaciones de alta tecnología que van a ser puestas en funcionamiento en los próximos días”.

La norma fue convertida en ley anteayer, con 53 votos afirmativos y sólo dos en contra. Los votos a favor fueron del Frente para la Victoria, UCR, PRO y Peronismo Federal, mientras que las manifestaciones negativas correspondieron a Fernando “Pino” Solanas y Norma Morandini. En la Cámara baja, las manifestaciones negativas fueron del FIT y Victoria Donda (Proyecto Sur).

Para correr trenes cargueros (o de pasajeros) en los distintos ramales, las empresas deberán inscribirse y cumplir con los requisitos establecidos en el registro de operadores ferroviarios. Las condiciones serán definidas con la reglamentación de la ley. El sistema de acceso abierto permite que, incluso cuando un privado quede a cargo de la operación de un trayecto, Ferrocarriles Argentinos habilite a otra empresa.

“Es un avance enorme en el de- sarrollo de las economías regionales y la recuperación de la conexión de ciudades y pueblos que habían quedado aislados en los ’90”, concluyó la diputada María del Carmen Bianchi (FpV).