La proyección para el PBI de Brasil cayó de una retracción del 3,5 por ciento a un 3,54 por ciento este año, aunque la de producción mejoró desde una baja del 4,5 a un 4,45 por ciento. Además, los analistas del mercado en el país vecino pasaron de una estimación de inflación del 7,59 por ciento a un 7,46 por ciento, algo vinculado a la menor proyección del valor del real en relación al dólar, que pasó de 4,30 a 4,25 reales para fin de año. La economía de Brasil tiene estrecha influencia sobre la situación argentina. En lo que va del año Brasil descargó parte de sus crisis sobre la Argentina a través del incremento de las exportaciones hacia la economía local.