Después del primer intento fallido para adjudicarlo el año pasado, ayer se anotaron cuatro propuestas para quedarse con el Banco Suquía. Los interesados son el Nuevo Banco de Santa Fe, el grupo Roggio, el Banco Hipotecario y el Macro Bansud. La única entidad que se abstuvo de reclamar asistencia financiera para cerrar la operación fue la santafesina, que está en manos de Enrique Ezkenazi, dueño de los bancos Santa Cruz y San Juan.
El Suquía era uno de los bancos controlados por el francés Credit Agricole, grupo que se fue de la Argentina después de la devaluación. Además del Suquía tenían el Bisel y el Banco de Entre Ríos.
Como estas entidades quedaron bajo la administración del Banco Nación, el banco público fue el encargado de recibir las ofertas técnicas y económicas de los interesados. Roggio fue el antiguo dueño del Suquía, grupo que se lo vendió a los franceses. Hace un año, Roggio también se presentó a la licitación, pero su oferta no convenció a la junta evaluadora.
Las autoridades del Banco Central, del Ministerio de Economía y del Nación se tomarán las próximas dos semanas para analizar las propuestas. Recién entonces se adjudicará la entidad que tiene más de un centenar de sucursales y una cartera de más de 700 mil clientes.
Las ofertas se presentaron ayer al mediodía y, luego de superar impugnaciones cruzadas, fueron aceptadas por los funcionarios después de más de cuatro horas de deliberaciones.