La canasta social que lanzará el Gobierno con productos alimenticios a bajo precio estará conformada con 16 tipos de bienes. Así lo adelantó ayer la subsecretaria de Defensa del Consumidor, Patricia Vaca Narvaja, quien también manifestó que el programa se implementaría la próxima semana. “Ayer (por el miércoles) tuvimos una reunión con todos los sectores empresarios. Notamos buena predisposición, tanto de supermercados como de almacenes. La semana que viene estaremos en condiciones de poner la canasta a disposición de los consumidores y determinarla en todos sus detalles”, precisó la funcionaria, quien está al frente de las gestiones con industriales y comerciantes para pactar los descuentos.
Vaca Narvaja señaló que la canasta estará integrada por fideos, arroz, harina, polenta, lentejas, arvejas, sal, aceite mezcla, vinagre, puré de tomate, tomate triturado, yerba, azúcar, té, cacao y mermelada. Los consumidores “no tienen que comprar todo el paquete. Es una serie de productos básicos que uno los puede comprar en su totalidad o individualmente”, precisó la subsecretaria. Cada uno de los participantes en la cadena de esos productos resignará una porción de sus ganancias para que los precios reflejen bajas significativas.
“Nuestra intención es que la canasta esté disponible no sólo en las cadenas de supermercados, sino en todos los negocios chicos del conurbano y de la provincia de Buenos Aires”, indicó Vaca Narvaja. Los consumidores podrán identificar los negocios que participan de la campaña por una oblea que pegarán en el frente de sus locales.
El Gobierno busca con esta medida poner un freno a la suba de precios de productos sensibles. La canasta básica de alimentos que elabora el Indec y que define la línea de indigencia subió de 327,60 pesos en marzo de 2004 a 354,40 el mes pasado. La mayor parte del salto se dio desde diciembre último, cuando estaba en 334,8 para una familia tipo. El primer intento del Gobierno fue pactar rebajas en cinco cortes de carne, pollos y lácteos, pero los acuerdos se cumplieron sólo parcialmente.
Los gobiernos de varias provincias implementaron sus propias canastas a precios preferenciales. La primera en hacerlo fue Tucumán, luego le siguieron la intendencia de Santa Rosa, La Pampa, la provincia de San Juan y esta semana se lanzaría la de Córdoba. El Gobierno aspira a que todos los distritos establezcan acuerdos con sus empresarios para reducir los precios de alimentos básicos.
“Si bien en abril los precios se mantienen estables, queremos mejorar el acceso de los sectores que menos ganan”, agregó Vaca Narvaja. Más allá de eso, un atractivo especial de la canasta social es que habrá rebajas no sólo en segundas marcas, sino también en primeras. La funcionaria está negociando este punto con los empresarios. Su objetivo es que la medida tenga mayor penetración, ya que impactaría con más fuerza entre los sectores medios y altos, lo cual ayudará a que los minoristas respeten los acuerdos con el Gobierno.