El director del Banco Central, Aldo Pignanelli, afirmó ayer que “la idea del Gobierno es pesificar los ahorros en dólares de la gente a 1,40”, y remarcó que la diferencia entre la pesificación de los depósitos y la de los créditos menores a 100.000 dólares, que se hará al valor de 1 a 1, “es un costo fiscal que deberá absorber el Estado”. “No sé de dónde salió lo de pesificar a 1,20 los depósitos”, señaló Pignanelli.
El funcionario insistió que la pesificación de los ahorros en dólares a la cotización oficial de 1,40 “es lo más probable”, y puso de relieve que “habrá un índice de ajuste sobre los pesos que están en los bancos que permitirá mantener el poder adquisitivo de esos fondos”. Explicó que “la diferencia entre el 1 a 1 (al que se pesificarán algunos créditos) y el 1,40 al que se pesificarían los depósitos la tiene que poner el Estado, es decir es un costo fiscal, porque los bancos no pueden hacerse cargo de esa diferencia por una decisión del Gobierno”.
En cuanto al índice de ajuste que se aplicará sobre los depósitos, explicó que “será una tasa de interés lo suficientemente alta como para acompañar la evolución general de la economía y el tipo de cambio”.
“Esa tasa tendrá incluida la estimación de la inflación para este año”, precisó el funcionario, quien estimó que “eso dará un índice que actualizará a los depósitos en pesos. Es un sistema que funcionó muy bien en Brasil y en Chile”.
Por otro lado, el director del BC afirmó que los dólares que venden los bancos “no son los de los ahorristas”, sino que precisó que los fondos en la moneda norteamericana que le corresponden a los que hicieron sus depósitos en esa divisa “están en manos de los deudores”. Asimismo, sostuvo que “el dólar no se va a disparar”, aunque reconoció que si se va camino a la libre flotación “no se ingresan las divisas al Central, sino que van al mercado de cambio”. En consecuencia, señaló que “la oferta de dólares de los exportadores” será la que equilibre el precio de la moneda norteamericana. “El que quiere comprar dólares va a los bancos o a las casas de cambios, pero esos no son los dólares de los ahorristas, sino que son dólares de la gente que los atesoró en su casa o en una caja de seguridad y ahora los vende”, indicó Pignanelli.
Pignanelli sostuvo que con la libre flotación del dólar en el mercado cambiario “habrá un precio único de la moneda para las exportaciones, las importaciones, las compras y las ventas”. Y destacó que “Argentina va a tener un superávit comercial este año lo que hará que sean más los dólares que entren que los que salgan”.