El reconocido actor cómico y cineasta italiano Roberto Benigni fue distinguido ayer por la Fundación Mijail Gorbachov, co-organizadora de la cumbre de los premios Nobel de la Paz en Roma, que lo designó “hombre de la paz” por su humanismo. El cineasta recibió una estatuilla de bronce de manos del ex número uno soviético (ver foto). Benigni es recordado por su realización de la afamada película La vida es bella, en la que se atrevió a la ficción en un tema controvertido como fue el Holocausto judío, traspasando el género del drama. El film fue premiado con tres estatuillas de la Academia de Hollywood en 1999 y el Gran Premio del Jurado de Cannes en 1998.
El actor, a quien el propio Federico Fellini lo comparó con Buster Keaton, acaba de estrenar su nuevo film Pinocho, recordó a modo de broma que Silvio Berlusconi, el primer ministro italiano, había sido propuesto este otoño europeo como candidato al premio Nobel de la Paz, finalmente atribuido al ex presidente norteamericano Jimmy Carter. “Es mejor que me apure”, dijo Roberto Benigni, en un gesto de lanzarse sobre el galardón. “No, la paz no es algo pesado”, agregó, haciendo un gesto de calcular el peso del trofeo con tono irónico.
La ceremonia, la tercera de este tipo, se llevó a cabo en un jardín municipal junto a la sede de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).