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› OTRO GOLPE EN CHECHENIA VINO A PERTURBAR EL ARREGLO POLITICO CON RUSIA
A cada paso de Powell, un nuevo bombazo
Un atentado suicida ayer en Chechenia, el segundo en la semana, causó la muerte de al menos 14 personas y heridas a 45. El ataque coincidió con la llegada a Rusia del secretario de Estado Colin Powell. El lunes, tres ataques lo habían antecedido en Arabia Saudita.
Un nuevo atentado suicida en poco más de 48 horas sacudió a la República de Chechenia, cobrándose la vida de entre 14 y 30 personas, según datos contradictorios y causando decenas de heridos, algunos de gravedad. El ministro checheno de Situaciones de Urgencia, Ruslan Avtaev, dijo al final del día que el balance era de 14 personas muertas y 45 heridas. El acto terrorista fue perpetrado por una mujer que se inmoló durante una fiesta musulmana a la que asistían miembros del gobierno provisional implantado por Moscú en Chechenia. La presunta rebelde separatista activó la carga explosiva adosada a su cuerpo en la localidad de Ilasjan-Yurt, a 40 kilómetros al este de Grozni, capital chechena, donde unos 15.000 musulmanes se habían congregado para celebrar la fiesta del cumpleaños del profeta Mahoma. El jefe de la administración prorrusa, Ajmad Kadirov, el blanco más probable del atentado, salió ileso a pesar de que la explosión se produjo a pocos metros de donde él se encontraba. El hecho ocurrió en momentos en los que el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, hacía su visita a Rusia.
El ataque causó más de 20 muertos y decenas de heridos, indicó un funcionario de la administración prorrusa citado por la agencia de noticias Itar-Tass. Chamsail Saraliev, asesor de Kadirov, aseguró que el atentado fue cometido por una sola mujer kamikaze. Sin embargo, el Ministerio de Protección Civil checheno afirmó que el ataque fue cometido por dos mujeres suicidas y que causó siete muertos y unos 15 heridos, sin dar explicación a las discrepancias con otras fuentes. Testigos dijeron que las mujeres se dirigieron hacia Kadirov después de la oración, que hombres y mujeres realizan por separado, pero fueron detenidas por los guardaespaldas y que entonces activaron los cinturones explosivos.
Decenas de personas resultaron heridas y fueron llevadas en coches privados y ambulancias. “Cuando se estaba orando, llegó caminando una mujer y se voló por los aires”, dijo el subjefe de gobierno checheno, Movsar Chamidov, a la agencia Interfax.
El fiscal de Chechenia, Vladímir Krávchenko, informó que una mujer fue identificada como Shajidá Baimurádova, de 45 años, miembro de la asociación de veteranos guerrilleros de la ciudad de Gudermes y llevaba encima el certificado de defunción de su marido en 1999. En otro momento de la jornada de ayer, fuentes chechenas y rusas elevaron el saldo mortal a 30 muertos y 150 heridos, 50 de ellos muy graves, y luego bajaron la cifra a 14 personas muertas y 45 heridas. “No excluimos que el atentado responda a un ‘encargo’ de las organizaciones terroristas internacionales, los hermanos musulmanes de la red Al-Qaida”, dijo un vocero de los servicios de seguridad rusos.
El lunes, tres suicidas, dos hombres y una mujer, cometieron otro ataque en Znamenskoe, a 60 kilómetros al noroeste de Grozni, donde murieron 59 personas y otras 200 resultaron heridas, según los últimos datos. Los kamikazes detonaron un camión cargado con una tonelada de explosivos junto a la sede de la administración local y destruyeron una decena de edificios. El ataque de Znamenskoe fue reivindicado en su página web por la guerrilla fundamentalista chechena que desde hace años lucha por expulsar a las fuerzas federales rusas e instalar en la república caucásica un Estado islámico independiente. Los nuevos ataques en Chechenia asestan un duro golpe al plan de arreglo político anunciado por el Kremlin para su república rebelde tras la primera guerra de 1994-96 y el conflicto actual aún irresuelto. El presidente ruso, Vladimir Putin, comparó el atentado del lunes en Chechenia con el triple atentado en Arabia Saudita e instó a combatir el terrorismo internacional. Los atentados de Riad fueron el preludio a la visita de Powell a Arabia Saudita, y coincidentemente ayer el ataque en Chechenia lo fue con su visita a Rusia.
El gobierno ruso, que declaró oficialmente en 1999 la victoria sobre el movimiento separatista pero dejó a 80.000 soldados en la región, sostiene que estos atentados son un intento de boicotear un referéndum de marzopasado en el que los chechenos se pronunciaron a favor de dictar una Constitución autónoma. “Los actos terroristas en Chechenia no detendrán los esfuerzos para el arreglo político en la república, y los planes trazados serán llevados a cabo”, afirmó el canciller ruso, Igor Ivanov.
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