La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, firmó ayer a la mañana en el Palacio de La Moneda el proyecto de ley que crea una Administradora de Fondos de Pensiones (AFP) estatal. Actualmente la administración de jubilaciones está bajo la gestión exclusiva de empresas privadas. Esta es una de las 56 medidas comprometidas por la mandataria para los cien primeros días de gobierno.

El proyecto de ley que crea una AFP estatal busca agregar más competencia al sistema de pensiones previsional de los chilenos. La cita contó con la presencia de la ministra del Trabajo, Javiera Blanco; ministros de Estado, presidentes de los partidos de la Nueva Mayoría oficialista y parlamentarios. “Sabemos que ésta no es una solución al problema de fondo. Sin embargo, representa un avance relevante”, recalcó la mandataria. Bachelet también señaló que “estamos dando un nuevo paso en el sistema de previsión social, mejorar este sistema es una prioridad, porque así permitiremos mejores posibilidades a las personas”.

“La idea es introducir más competencias en el sistema y cubrir a aquellas personas como mujeres, trabajadores independientes y aquellos que viven en zonas extremas del país”, agregó la mandataria.

Bachelet dijo que la medida, de ser aprobada por el Congreso, permitirá además mejorar la rentabilidad general del sistema heredado de la dictadura militar (1973-1990). La AFP estatal estará a cargo de un directorio de siete miembros, todos designados por la presidenta de Chile, aunque cuatro de ellos serán propuestos por la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo). Dichos directores deberán cumplir con los requisitos de estudio, experiencia, conducta personal y comercial que señala el artículo 13. En cuanto a su composición del capital social e inicial, el Fisco aportará el uno por ciento y la Corfo el 99 por ciento restante, a lo que se agregarán los activos y pasivos que adquiera con motivo de su ejercicio comercial.

La mandataria recordó que el sistema de AFP tiene 9,6 millones de afiliados, de los cuales sólo 5 millones cotiza, mientras que la pensión promedio es de 185.000 pesos chilenos (335 dólares), inferior al salario mínimo, que hoy alcanza a 210.000 pesos (381 dólares).