Miles de campesinos llegados desde varios puntos de Paraguay se manifestaron ayer frente al Congreso Nacional de Asunción para exigir la renuncia del presidente, Horacio Cartes. Además, reclamaron un giro profundo en la política socio-económica y la aplicación real de una reforma agraria que desconcentre la propiedad de la tierra.

Los trabajadores, convocados por el partido Paraguay Pyahurá, la Federación Nacional Campesina (FNC) y el Frente Guasú, se reunieron para exigir no sólo la reforma agraria, sino el respeto a los derechos humanos individuales y colectivos y el fin de las represiones e imputaciones contra campesinos. Además, denunciaron el uso de semillas transgénicas de soja y el empleo de agrotóxicos en los cultivos, que perjudican la salud de la población rural y aceleran el agotamiento de los recursos del suelo.

La coordinadora de la columna proveniente del este del país, Agusta Caballero, destacó que en su camino a Asunción, los campesinos recibieron el apoyo y la solidaridad de los ciudadanos por cada ciudad que atravesaban, hecho que atribuyó a que el pueblo se encuentra inquieto. “El pueblo está descontento, porque el paraguayo pobre no tiene futuro, está angustiado y desesperado”, dijo Caballero. Además, sostuvo que la solución a los problemas de los paraguayos es la renuncia de Cartes y la constitución de un gobierno patriótico, formado por personas honestas que orienten programas de desarrollo y soberanía nacional.

Por su parte, el secretario adjunto de la FNC, Marcial Gómez, denunció que el sistema económico paraguayo profundiza la dependencia internacional, la entrega y el saqueo de los recursos naturales. Puso como ejemplo la cuestionada Ley de Alianza Público-Privada, impulsada por Cartes, que habilita la participación de empresas privadas en la gestión de servicios públicos, iniciativa rechazada por organizaciones sindicales. Además, Gómez acusó a los narcotraficantes de influenciar al poder político. “Los narcotraficantes financian las campañas electorales e incluso encabezan las listas de los partidos, por eso hay que plantear debates y asambleas ciudad por ciudad, para que el pueblo participe permanentemente en su propia organización”, agregó el secretario.

La dirigente del partido Paraguay Pyahurá, Dora Flecha, dijo que para ellos el objetivo está logrado, dado que consiguieron la aceptación de una gran parte del país. “A lo largo de la marcha conseguimos el apoyo de la gente que nos ofreció su solidaridad, o un vaso de agua para continuar camino hacia el microcentro de Asunción”, dijo Flecha.

Paraguay es uno de los países del mundo con mayor concentración de tierras, la mayor parte de ellas en manos de empresarios dedicados a la exportación agrícola y ganadera, que sitúa al país sudamericano como el sexto mayor exportador de carne bovina. En contraposición con este sistema, los manifestantes exigieron una reforma agraria que transforme la tenencia de la tierra, elimine el latifundio y desarrolle la producción agrícola para satisfacer las necesidades internas, así como la producción industrial ligada a la materia prima nacional.

La Policía Nacional informó que la marcha se desarrolló sin incidentes, y su reporte comunicó que más de 1000 personas participaron de la movilización. “Desde el momento de partida de todos los puntos no se ha escuchado ningún incidente. Esta gente se está comportando de manera correcta, de la manera en que un ciudadano puede manifestarse”, expresó Miguel Ayala, comisario a cargo del operativo de seguridad.