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Esta vez el asesino millonario no pudo esconderse detrás de su enfermedad imaginaria. Tras la confirmación de su arresto, el ex dictador Augusto Pinochet deberá ser fichado –foto y huellas digitales incluidas– como cualquier otro procesado. Por un ajustado fallo de tres votos contra dos, la Corte Suprema de Chile ratificó la orden de arresto domiciliario dispuesta por el juez Juan Guzmán Tapia.
En una reñida votación, los jueces de la Segunda Sala de la Corte Suprema de Chile dieron un espaldarazo a Guzmán Tapia al ratificar la orden de arresto que dictó y el procesamiento a Pinochet. El juez estudia su responsabilidad en un asesinato y nueve secuestros atribuidos a la Operación Cóndor, el plan secreto que coordinó en los años setenta a las dictaduras del Cono Sur para el exterminio de opositores. Así, el veredicto rechazó un recurso de amparo que presentó la defensa y sostiene que hay fundamentos para incriminar a Pinochet. En un claro apoyo a Guzmán Tapia, deja en sus manos analizar la salud mental del ex dictador y, además, contradice el argumento de la defensa según cual el magistrado no es la persona idónea para llevar adelante el proceso. El veredicto señala que Guzmán Tapia es “una autoridad que tiene claramente competencia, tanto para disponer el procesamiento aludido como ordenar la prisión preventiva” del inculpado. Finalmente, el fallo no hace lugar al argumento de la defensa que sostiene que Pinochet no está en condiciones mentales de enfrentarse a un proceso. En este sentido, el fallo indica que si Guzmán Tapia cree que Pinochet está apto para enfrentar un juicio, debe ser así.
La defensa del ex dictador anunció que acatará el arresto, aunque no adelantó la estrategia legal que seguirá para revocar el dictamen de Guzmán Tapia. No obstante, según fuentes judiciales, en los próximos días el equipo jurídico defensor solicitará la libertad condicional de Pinochet y pedirá su sobreseimiento definitivo en base a su imposibilidad mental de enfrentar un proceso judicial.
Además de su inminente arresto, Pinochet sufrió otro golpe que complica la maraña judicial a la que se enfrenta. Un documento de la DINA –la policía secreta de la dictadura chilena– firmado por Pinochet revela el vínculo entre el dictador y ese organismo represivo. Este documento deja en clara evidencia su relación con la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), el organismo represivo que participó en la Operación Cóndor. Según el diputado socialista y abogado querellante Juan Bustos, el documento es la “comprobación” de que Pinochet era el jefe máximo de la DINA y que “siempre estuvo al tanto de todo el detalle de lo que ese organismo hizo, lo que él niega”. Efectivamente, en la indagatoria que le tomó Guzmán Tapia que determinó la apertura del proceso, el asesino millonario declaró que no “tenía tiempo de preocuparme de asuntos menores” como la Operación Cóndor. Cabe recordar, sin embargo, que durante su dictadura, Pinochet se jactaba de que en Chile no se movía ni una hoja sin que él se enterara.
Sus partidarios se rasgaban las vestiduras por el fallo argumentando que la orden de arresto puede acelerar el deterioro de su salud y apurar su deceso. Mientras tanto, el general de 89 años ayer aguardaba en su finca costera de Los Boldos la notificación judicial que da curso a su aprehensión. Luego debería llevarse a cabo la filiación o el fichaje de Pinochet, que incluye tomas de fotografías de su rostro y sus huellas digitales, en un trámite que deberá cumplir como cualquier hijo de vecino procesado en Chile. El enfermo imaginario fue autorizado por su equipo médico a trasladarse a su residencia de descanso de la costa chilena, donde recibió el año nuevo. La residencia de descanso de Los Boldos es una de las 11 propiedades que poseen en Chile Pinochet y su esposa. La amplia finca, según fuentes de su entorno, es el lugar favorito del ex dictador para pasar el verano. Aquí Pinochet ya cumplió una vez un arresto de seis semanas, en 2001, que decretó el mismo juez Guzmán Tapia por las 75 ejecuciones atribuidas a la Caravana de la Muerte. Ese primer juicio abierto en Chile quedó, sin embargo, archivado en 2002, después de que laCorte Suprema sobreseyera a Pinochet al considerar que una demencia moderada le impedía defenderse ante los tribunales.
Pinochet fue procesado en la causa del Plan Cóndor tras un extenso debate en torno de sus condiciones mentales. Mientras la defensa gritaba a los cuatro vientos que su demencia senil no le permite defenderse en un juicio, dos factores demostraron lo contrario. En primer lugar, la revelación de sus millonarias cuentas secretas en el Banco Riggs de Washington, cuyo manejo supone complejas operaciones financieras. En segundo lugar, una entrevista que dio a un canal en Miami donde pudo responder con total lucidez a las preguntas realizadas.