EL MUNDO
› LA OPOSICION LIBANESA PIDE LA RENUNCIA DEL GOBIERNO
Los anti-Siria se van a levantar
Un tercio de los miembros del Parlamento y docenas de opositores pidieron la dimisión del gobierno libanés pro sirio y que se nombre a un Ejecutivo provisional que supervise la retirada de las tropas sirias del Líbano y a los ciudadanos que se sumen a un “levantamiento por la independencia”. Más de 40 de los 128 diputados del Parlamento y decenas de opositores pidieron a los ciudadanos que se sumen a “un levantamiento democrático y pacífico por la independencia”, en el marco de la muerte el pasado lunes del ex premier Rafik Hariri y la posterior exigencia de Washington a Damasco de que retire sus tropas del Líbano.
Al término de un mitin de la oposición, Samir Frangieh leyó una declaración en la que ésta “exige la formación de un gobierno interino para proteger a los libaneses y garantizar una retirada inmediata y completa de las fuerzas sirias de Líbano antes de las elecciones legislativas libres y honestas” previstas para mayo. El principal representante de la oposición drusa, Walid Jumblatt, que no participó en el mitin por “razones de seguridad”, dijo que “es hora de que el régimen se vaya”. Jumblatt, que ha pedido al presidente sirio Bashar al Assad que revise las relaciones libanesas-sirias, también pidió una investigación internacional sobre el papel del jefe sirio de las fuerzas de inteligencia en Líbano, el general Rustom Ghazaleh.
Las primeras fisuras aparecieron también en el gobierno con la dimisión del ministro de Turismo, Farid al Jazen. Considerado leal al presidente pro sirio Emile Lahoud, Jazen dijo que “el actual gobierno es incapaz de resolver la peligrosa situación en el país”. Incluso el ex ministro y diputado Najib Mikati, que tiene estrechas relaciones con los dirigentes sirios, pidió la renuncia del gobierno.
La oposición ha acusado al gobierno y a sus mentores en Damasco de estar implicados en el atentado con coche bomba que segó la vida del ex primer ministro Rafik Hariri y a otras 14 personas el lunes. Pero el ministro del Interior, Suleiman Franjieh, criticó a los que acusan al gobierno de complicidad en el asesinato de Hariri. Las autoridades libanesas dicen que el atentado fue probablemente realizado por un kamikaze. Sin embargo, algunas personas han especulado que dada la fuerza de la explosión y los amplios daños causados, los explosivos podrían haber sido colocados bajo la calle. Hariri, que fue primer ministro buena parte de los últimos 12 años, abandonó el gobierno en octubre por desacuerdo con Lahoud por la influencia siria. El Parlamento, por presión de Siria, ha empujado a realizar una enmienda constitucional para extender el mandato de Lahoud.
El funeral de Hariri el miércoles se convirtió en una manifestación contra los regímenes en Líbano y en Siria, que tiene 14.000 soldados en territorio libanés y maneja los hilos del poder desde Damasco.
Por otro lado, ayer se supo que Assad ha designado a su cuñado, el general Asef Shawkat, para ocupar la jefatura del servicio de la inteligencia militar, en sustitución del general Hasan Jalil, que ocupaba el cargo desde finales de la década pasada.