Los partidos de la coalición chiíta que ganaron las elecciones iraquíes del mes pasado, ayer reconfirmaron el nombre de Ibrahim Jaafari como su candidato para primer ministro, asegurándose que ahora está en camino para tomar el puesto. La Alianza Iraquí Unida (AIU) seleccionó a Jaafari, médico y líder del partido Dawa como su candidato después que Ahmad Chalabi, ex favorito del Pentágono y miembro secular de la coalición, retirara su candidatura.
Es un vuelta de tuerca extraordinaria en la historia de la invasión estadounidense a Irak el haber traído a Jaafari al poder y a dos partidos islámicos desde hace mucho aliados a Irán. El retiro de Chalabi provocó el voto de los 140 miembros de la AIU que tienen bancas en la asamblea nacional de 275 miembros. “Todos hemos decidido elegir a Ibrahim al Jaafari sin que nadie se ofenda por ello”, dijo Jewad al Maliky, un vocero del partido Dawa. Jaafari es amable y popular en Irak, pero un observador iraquí se preguntaba si sería eficaz como primer ministro. “Hasta ahora ha sido todas las cosas para todos los hombres. Estaba en contra del ataque a Faluja, pero también se opone a establecer una fecha para la retirada estadounidense.”
Nacido en la ciudad santa chiíta de Kerbala, Jaafari, de 58 años, estudió medicina en la Universidad de Mosul. Se unió al partido Dawa, establecido en 1958 para contrabalancear al poderoso partido comunista. Estuvo exiliado veinte años después de 1988, primero en Irán y luego en Gran Bretaña. Regresó a Irak en 2003 en el momento de la invasión.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: C.D.