EL MUNDO
› EL LABORISMO GANARIA LA ELECCION
Más economía que Irak
Por Walter Oppenheimer *
Desde Londres
Tras dos semanas de campaña, todos los sondeos publicados en los últimos días señalan que el Partido Laborista británico se encamina hacia su tercera victoria consecutiva. Los laboristas obtendrían entre el 37 y el 41 por ciento de los votos, según esos sondeos, que sólo atribuyen del 31 al 34 por ciento de los votos al Partido Conservador. Los Liberales Demócratas consolidan sus expectativas con una proyección de votos de entre el 20 y el 21 por ciento.
Los malos datos de los tories, que habían recortado las distancias de manera muy significativa en el momento de convocarse las elecciones, han provocado los primeros síntomas de nerviosismo en la dirección del Partido Conservador. Los tories han basado su campaña en dos ejes: explotar el miedo a la inmigración y atacar al líder laborista, Tony Blair, cuya popularidad ha caído en picada a lo largo de una legislatura marcada por el desencanto provocado por la guerra de Irak.
A esas dos armas el laborismo ha respondido centrándose en la buena marcha de la economía e intentando proyectar una imagen de partido más que de líder. Los sondeos indican que esa táctica está funcionando y que ha sido decisiva la incorporación a la campaña de Gordon Brown, el gran rival interno del primer ministro. Los sondeos siguen señalándolo a él como el candidato preferido por los seguidores laboristas y también entre los votantes de otros partidos.
De confirmarse el escenario dibujado por los sondeos, los laboristas obtendrían una clara ventaja y, aunque verían sustancialmente reducida su actual mayoría de 165 diputados, obtendrían una mayoría lo suficientemente amplia como para gobernar sin grandes problemas y lo bastante reducida como para forzar más pronto que tarde el relevo entre Blair y Brown.
* De El País de Madrid. Especial para Página/12.