EL MUNDO › LOS DEMOCRATAS SE LANZARON A ATACAR A BUSH
Lluvia negra en la Casa Blanca
Los aspirantes a la candidatura demócrata a la presidencia de Estados Unidos y el ex presidente demócrata Jimmy Carter coincidieron en culpar a George W. Bush de la inestabilidad en Irak, donde un nuevo atentado se cobró ayer una veintena de víctimas. Carter calificó la guerra en Irak de “completamente innecesaria e injusta”, en una aparición pública en Georgia con el aspirante a la candidatura y favorito, el ex gobernador de Vermont, Howard Dean.
El senador John Kerry, uno de los ocho aspirantes demócratas, dijo a la cadena de televisión ABC que el gobierno de Bush tiene “la política exterior más insensata, arrogante, inepta y basada en ideología de la historia reciente”. El también senador y aspirante presidencial John Edwards afirmó en una entrevista en CBS que Bush ha fracasado en Irak. “Necesitamos una fuerza de seguridad internacional. La OTAN podría estar en Irak ahora mismo.” Agregó que “tenemos una política fracasada ahora mismo. ¿Por qué la administración no está dispuesta a cambiar el rumbo? No tengo idea”, dijo el senador por Carolina del Norte.
Jimmy Carter, que cuenta con un gran prestigio en el país, señaló que la invasión estuvo basada en “información errónea y declaraciones engañosas”, en relación con las repetidas alegaciones de Washington de que Saddam Hussein poseía armas de destrucción masiva, que hasta ahora no se han encontrado. El ex presidente aclaró que no estaba avalando la candidatura de Dean, quien trabajó para él en su campaña electoral de 1977, pero enfatizó que agradecía especialmente su posición “valiente y franca” en relación a Irak.
El ex gobernador del pequeño estado de Vermont salió del anonimato en los primeros momentos de la campaña por su oposición a la invasión de Irak, una posición que no era compartida por muchos de sus contrincantes o por señalados líderes del Partido Demócrata.
Sin embargo, funcionarios de la administración Bush alegan que el más reciente ataque es parte de una serie de atentados dirigidos a dañar los esfuerzos para reconstruir a Irak.
El atentado ocurre en un momento particularmente delicado para Estados Unidos, la víspera de una importante reunión en la ONU sobre Irak, el inicio del proceso de primarias demócratas y a dos días del discurso sobre el estado de la Unión de Bush. “Eso demuestra que las fuerzas opuestas a la ocupante son más fuertes y están mejor organizadas de lo que hemos creído”, opinó Charles Butterworth, especialista en Medio Oriente de la Universidad de Maryland.