Todo estaba preparado para que Carlos Menem disfrutara de su condición de local. Otros tres candidatos del PJ, José Manuel de la Sota, Néstor Kirchner y Adolfo Rodríguez Saá, tenían reservado el rol de visitantes y no habían asegurado su presencia. Al final, el único que asistió fue De la Sota, quien prometió que competirá “sí o sí” en la interna peronista. El puntano, en cambio, envió una delegación para que presentara sus reclamos, mientras que Kirchner ni siquiera asistió. Fueron indicios para entender lo que hará cada uno en el tiempo que resta hasta el 15 de diciembre.
De la Sota llegó a la reunión junto a su equipo de asesores, entre ellos su jefe de campaña, Carlos Caserio. Su presencia, y también sus declaraciones, demostraron que es el competidor de Menem más dispuesto a participar de la interna. Ante los menemistas, el cordobés reclamó que puedan votar los afiliados a partidos provinciales o municipales que no presenten candidatos en la elección presidencial. Y luego exigió que quienes se presenten en la interna se comprometan a no participar por fuera del partido en caso de perder. Ese reclamo, que fue festejado por los menemistas, pareció dirigido a Rodríguez Saá, quien ya reconoció que, ante una derrota en la interna, podría presentarse por fuera del PJ.
La presencia del cordobés reveló su disposición a enfrentar a Menem, a pesar de su pobre performance en las encuestas. Entre sus adversarios sospechan que su intención podría ser “legitimar” al riojano, dándole la oportunidad de ganar el 15 de diciembre para quedar mejor posicionado para la elección general. Para algunos, esta sospecha se justificaría en el buen trato y cordialidad que se prodigaron ayer el Gallego y los menemistas. Sin embargo, en su entorno hacen una lectura muy diferente: “A nosotros nos conviene la polarización Menem-De la Sota. Porque si la interna se dirime entre ellos, el Gallego tiene mucho para ganar y poco para perder”, aseguró a Página/12 un asesor de su estrecha confianza.
La idea de los delasotistas es captar el voto antimenemista, que podría confluir sobre el cordobés si los otros dos candidatos –Rodríguez Saá y Kirchner– se retiran de la interna. A eso apuestan. “Queremos jubilarlo a Menem, pero el único modo es ganarle la interna”, aseguraba anoche el principal operador del Gallego, habitual contacto con los bonaerenses.
Si la presencia de De la Sota reveló su intención de ir “por adentro”, las ausencias de Rodríguez Saá y Kirch-ner probaron que ambos están mucho más cerca de competir “por afuera”. El puntano, por lo menos, envió a cuatro delegados –los diputados Oraldo Britos y María Torrontegui, el intendente Aldo Rico y el vocero Martín García– que llevaron una carta que había sido redactada, un rato antes, en el Club Español, flamante reducto del “adolfismo”. La misiva anticipaba la “decisión de participar en la interna para la elección de candidato a presidente”. Y remarcaba “el profundo sentido de pertenencia con la doctrina de Perón y Eva Perón”.
Pero más allá de las palabras, el mensaje del Adolfo exigía varios puntos para participar de la interna: que se convoque al Congreso del PJ, que se designe “una nueva junta electoral con todos los sectores”, que en la elección se utilice el “padrón electoral nacional”, entre otros reclamos. Esas condiciones son una propuesta “de máxima” para justificar un eventual éxodo del PJ.
“Con este documento, Adolfo ratifica el deseo de participar en la interna”, remarcó Britos luego de asistir a la reunión partidaria. De cualquier forma, en el adolfismo saben que es muy difícil que el menemismo acepte utilizar el padrón nacional general, que incluiría a independientes y afiliados a otros partidos, en la elección del 15 de diciembre. Por eso, ese reclamo justificaría un alejamiento temporario del partido.
La presentación por fuera del PJ parece ser, asimismo, la opción elegida por el santacruceño Kirchner. Ayer no fue al encuentro, ni tampoco envió a sus delegados, en prevención de una “batalla campal entre duhaldistas y menemistas”, como aseguró a este diario su jefe de campaña. Cerca delpatagónico, dijeron que prefieren esperar a que “se resuelva el tema” y elogiaron la ampliación de la junta electoral con dos representantes de cada candidato: “Es una medida razonable”, alabó el operador de Kirchner. Además, en silencio, el gobernador de Santa Cruz espera beneficiarse con buena parte del PJ bonaerense. “El Gobierno está viendo en Kirchner una alternativa. Como De la Sota no funcionó, no tienen vocación de seguirlo”, explicó su operador. De todas formas, Kirchner quiere que el problema “lo arreglen Menem y Duhalde” y, mientras tanto, se prepara para el acto que hará mañana en Rosario, en ocasión del 17 de Octubre.