EL PAíS
› EL CONGRESO PERONISTA DE HOY PUEDE POTENCIAR EL PODER DE DUHALDE
Solo falta un candidato para gritar bingo
El duhaldismo cuenta con una cómoda mayoría de congresales para sesionar en Obras Sanitarias. Confirmará su fecha de internas y juntará las de fórmulas presidenciales con la de autoridades partidarias. Su objetivo de aislar a Menem parece logrado. Todavía no consiguen un candidato para enfrentarlo.
Por Felipe Yapur y
Diego Schurman
Eduardo Duhalde consolidará hoy el espacio antimenemista que tanto anhelaba. Será a través de un congreso donde prácticamente la totalidad de los representantes del PJ –con la obvia excepción de los seguidores de Carlos Menem– establecerá el 19 de enero como fecha de las internas. Y no sólo eso: allí también se aprobará para ese día la renovación de autoridades partidarias, lo que podría interpretarse de antemano como el golpe de gracia para las aspiraciones presidenciales del riojano si no fuera porque el duhaldismo aún no pudo definir su propio candidato.
El congreso, que se realizará en Obras Sanitarias, ratificará lo votado hace apenas una semana en Parque Norte. Pero esta vez contará con todos los resguardos legales como para no dejar flancos abiertos a una impugnación menemista. De hecho, la jueza María Romilda Servini de Cubría se ocupará de la fiscalización a través de dos decenas de veedores.
Si bien públicamente la pelea entre Menem y Duhalde se concentró en la fecha –el duhaldismo ratificará hoy el 19 enero pese a que el menemismo había votado para que fuera el 15 de diciembre–, el problema de fondo se generó por un ardid de la Casa Rosada que terminó descolocando al ex presidente.
Es que Duhalde llamó a votar junto a la interna la renovación de autoridades partidarias. En buen romance: anunció el fin del mandato de Menem como jefe del partido, comprometiendo a las principales figuras del PJ a mover su aparato para votar su desplazamiento.
El fin de semana el menemismo negoció a contrarreloj la posibilidad de eliminar este tópico de la agenda del congreso. Y por eso varios de sus representantes –Alberto Pierri y Alberto Kohan, entre otros– insinuaron la participación del sector en la cumbre hegemonizada por el duhaldismo. Pero al no lograr su objetivo, y sospechar además de la inminencia de un nuevo fallo judicial que alteraría nuevamente el cronograma electoral, el sector volvió a salir con los tapones de punta.
El propio Menem tomó la voz de mando, pese a que últimamente venía dejando los ataques en boca de sus laderos. “Creo que Duhalde se quiere quedar, por eso decidió prorrogar la fecha de las internas”, señaló el ex presidente a una radio cordobesa.
Su hermano Eduardo no fue tan medido. El senador equiparó la avanzada duhaldista con un “golpe institucional”. Y pronosticó nuevas divisiones en el seno del justicialismo, en línea con la que el menemismo ya produjo en el Congreso de la Nación al partir el bloque de legisladores.
De paso lanzó la amenaza de “impugnar” el congreso partidario de hoy, aunque sin precisar las razones. Podrían ser, según dejó entrever Kohan, supuestas irregularidades en las bajas y altas de congresales que hoy votarán a mano alzada la estrategia de Duhalde.
Aislar al enemigo
En verdad, lo que el duhaldismo consolidará hoy será el aislamiento de Menem de la estructura partidaria. El ex presidente contaba hasta ahora como aliado circunstancial con Adolfo Rodríguez Saá, quien bancaba la idea de hacer los comicios el 15 de diciembre. Pero, viendo cómo venía la mano, el puntano preparó el terreno para iniciar su alejamiento del PJ para no quedar enredado en la pelea menem-duhaldista. Su aliado Hugo Moyano comenzó a admitir públicamente esa posibilidad (ver aparte).
Al duhaldismo mucho no le preocupa. Dan por cantada la ausencia de los congresales riojanos, puntanos y también los salteños que responden al gobernador Juan Carlos Romero, el compañero de fórmula de Menem. En cambio, consideran un triunfo la presencia de los representantes santafesinos pese al anunciado faltazo de Carlos Reutemann, quien volvió a esgrimir razones de salud. Menemistas y duhaldistas no dejan de pelearse para ver quién capitaliza la buena imagen del gobernador de Santa Fe. Mientras algunos en la Casa Rosada mantienen el utópico sueño de que se aún se postule, en las huestes del ex presidente lo consideran hombre propio. Para ello agregaron ayer una declaración de su hermano Enrique –a quien suelen endilgarle la representación del Lole– inclinándose por las “bondades” del menemismo.
Aún si fuera así, todo indica que el armado del duhaldismo para la reunión de hoy está seguro. Los principales operadores del Presidente en la Cámara de Diputados se jactan de haber desactivado una maniobra de Romero para que los mandatarios del norte pegaran un faltazo al congreso partidario. Tras fracasar en un intento similar, durante el congreso de Parque Norte de hace una semana el salteño sintió en carne propia que en cuestiones partidarias la amistad no es una moneda que cotice alto.
Ayer, fieles representantes del menemismo como Javier Mouriño o el propio Eduardo Menem sugirieron la existencia de una amenaza del Gobierno de no enviar fondos a aquellas provincias cuyos mandatarios no concurrieran a la cumbre partidaria de hoy.
En la Casa Rosada lo niegan. Y dicen que la suma de los gobernadores a la estrategia aislacionista de Menem es voluntaria. “No sólo pretendemos que se vote la renovación de las autoridades partidarias a nivel nacional. Queremos que cada provincia convoque para el 19 de enero la renovación de las autoridades de cada distrito”, aseguró a este diario un diputado duhaldista que tiene comunicación directa con el Presidente.
El hecho de que cada distrito elija ese día a sus autoridades partidarias provocará, según el análisis duhaldista, “la movilización general del partido”, donde pesará la opción que haya realizado cada gobernador. “No queremos repetir la experiencia de Antonio Cafiero en 1988, cuando compitió solo con Menem en la interna”, repiten los duhaldistas. Estos consideran que con todo el aparato movilizado le será muy difícil al riojano poder alzarse con un triunfo.
El dato que les permite aventurar que podrán conseguir este objetivo es que en la mesa de conducción del congreso partidario están sentados buena parte de esos gobernadores claves.
El propio Duhalde piensa en promoverse como candidato a nuevo titular del PJ y así traccionar los votos que recibiría de su distrito, la populosa provincia de Buenos Aires, hacia el candidato que más lo convenza.
Por supuesto que nada es tan fácil como parece. Los dirigentes duhaldistas consultados no arriesgan nombres. No obstante, todo parece limitado a Néstor Kirchner y José Manuel De la Sota.
“Ninguno despierta grandes pasiones entre la militancia”, sostienen al tiempo que comienzan a mirar a dirigentes de la provincia de Buenos Aires como eventuales compañeros de fórmula. Si bien se trata del distrito más importante del país, no se destaca por la oferta electoral. Sólo las candidaturas de Hilda “Chiche” Duhalde y Felipe Solá tienen buena aceptación en las encuestas.
“El problema es que Chiche ya dijo que tiene un pasaje de avión para el 26 de mayo y Felipe quiere ser gobernador. Habrá que seguir buscando”, reconoció a Página/12 un influyente legislador duhaldista, quien además jura que allí reside la razón de llevar la fecha de los comicios internos para el 19 de enero: “Tiempo, tiempo es lo que necesitamos”, repitió el diputado.
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