Desde México D.F.

A primera hora de la mañana, la Presidenta llamó a Héctor Timerman para anunciarle que por recomendación médica suspendía el viaje a México. Más de doscientos empresarios y los ministros de Planificación, Julio De Vido, y de Ciencia, Lino Barañao, ya estaban rumbo a tierra azteca o empezando rondas bilaterales. Se decidió continuar con las actividades y, pasado el mediodía, el canciller junto a su par mexicana, Patricia Espinosa, anunció que la visita de Cristina Fernández de Kirchner se reprogramó para el 30 de mayo. El presidente Felipe Calderón ayudó a compensar la frustración: invitó a los empresarios argentinos a un almuerzo en la residencia Los Pinos, que se realizará hoy. Un gesto valorado por los hombres de negocios y por el gobierno argentino, que lo destacaban como una señal de las buenas relaciones que hoy existen entre ambos países.

“O me pide la renuncia o suspende el viaje”, pensó el canciller cuando escuchó tan temprano el llamado desde Olivos. Era la segunda opción. Quedó así postergada la firma de convenios de intercambio cultural, científico y económico que ya estaban listos. La unidad médica de Presidencia daría poco después la razón de la decisión: “Por prevención se indicó reposo por 24 horas, desaconsejándose viajar al exterior”, explicó en un comunicado. El día anterior había delegado en el ministro Florencio Randazzo un encuentro con el gobernador reelecto de Salta, Juan Manuel Urtubey. Un cuadro de hipotensión arterial la había alejado de la agenda oficial y por precaución se evitaba el despegue en el Tango 01.

Faltaban los mariachis

A media mañana, Timerman partió rumbo al moderno edificio de la Secretaría de Relaciones Exteriores, ubicada frente a la Alameda y a metros del magnífico Palacio de Bellas Artes, donde se exhiben murales de Siqueiros, Rivera y Orozco. Allí, durante casi tres horas, ambos cancilleres realizaron primero un encuentro privado y luego encabezaron el trabajo de las tres comisiones que integran el Acuerdo de Asociación Estratégica.

“Argentina y México somos socios estratégicos. En 2007 empezamos una nueva etapa de cooperación creciente en temas regionales y globales”, dijo la canciller Espinosa y remarcó que “en 2010, Argentina se convirtió en el cuarto socio comercial de México en América latina” y que “el intercambio comercial ascendió a 2900 millones de dólares, un 30 por ciento más que en 2009”. Argentina aspira a compensar el saldo que hasta ahora le es desfavorable en unos 500 millones de dólares. Espinosa destacó la potencialidad de ampliar los negocios con inversiones en cada uno de los países. Luego de desearle una rápida recuperación a la Presidenta por el “pequeño” problema de salud, la canciller recordó que en diciembre pasado el presidente Calderón “tuvo el honor de develar el mural Ejercicio plástico de Siqueiros, restaurado en la vieja Aduana Taylor, lo cual es un símbolo de la presencia cultural de México en la Argentina”.

Timerman tomó la palabra y continuó en el mismo tono. “Acá estamos dos cancilleres amigos de dos países amigos, cuya asociación estratégica va a ser el motor que termine unificando América latina”, se esperanzó. Agradeció a México por la generosidad en recibir a perseguidos de América latina y Europa que han sufrido dictaduras y, como contrapartida, dijo “compartir el difícil momento que vive México por el narcotráfico: vamos a cooperar para combatir ese flagelo”. También señaló que “Argentina ve con mucha preocupación el tráfico de armas, una de las causas de la violencia en México”.

Una rápida recorrida por las primeras planas de los diarios mexicanos espanta. El hallazgo de fosas clandestinas con casi 120 cadáveres en el ayuntamiento de Matamorros, al norte del país, es la noticia que conmueve por estos días. Cientos de personas son denunciadas como desaparecidas y aparecen acribilladas después en fosas anónimas. Un aviso a página entera sorprende: “Detienen a 84 secuestradores en Chihuahua, desarticulan 18 bandas”, reza el texto mientras una nota en la misma edición de El Universal asegura que “mexicanos quieren regresar a Japón” porque “es difícil adaptarse a la inseguridad”.

Negocios y más negocios

En el hotel Saint Regis, representantes de pequeñas y medianas empresas compartieron sus propuestas con sus pares mexicanos. Desde vinos, pasando por alfajores, software y proyectos de energía alternativa se desplegaron en un inmenso salón del segundo piso. La ausencia de la Presidenta les dejó un sabor agridulce pero no disminuyó el ritmo del intercambio. Hoy seguirán, entusiasmados además por la invitación al almuerzo con el presidente Calderón.

El ex diputado peronista Fernando Maurette tiene en agenda quince reuniones con potenciales clientes para sus vinos de La Pascuala. Convertido en pequeño empresario, se cruzó en la sala con otros hombres de negocios a gran escala. Juan Carlos Lascurain, el ex titular de la UIA, viajó en representación de Adimra y se entrevistó con la Asociación de Energía de México, que reúne a 35 compañías que generan electricidad. “Ya estuvimos en los encuentros de China, Marruecos, Perú, Brasil, India. No sólo se trata de vender sino que aprovechamos para hacer estudios de mercado. Ahora, por ejemplo, nos van a enviar un informe sobre obras en energía que se van a realizar en México”, explicó Lascurain acompañado por José Cíntolo, de Adimra. Otro objetivo de los empresarios es que en el cupo de 25 por ciento de participación local que estipula México para los emprendimientos internacionales se incluya a la región.

Mañana, el canciller cerrará el seminario de Oportunidades de Negocios. El 30 de mayo, los presidentes pondrán el moño a los convenios de intercambio.