El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, rendirá hoy a partir del mediodía su primer informe de gestión de gobierno ante la Cámara de Diputados. Unas horas antes, en la reunión de Labor Parlamentaria, los presidentes de todas las bancadas políticas definirán la metodología que utilizarán en el recinto, donde el funcionario hará una exposición y responderá a las preguntas de los diputados. Abal Medina también deberá llevar por escrito las respuestas al extenso cuestionario anticipado por los legisladores de cada bloque que promete batir records: sólo los diputados radicales enviaron al jefe de Gabinete 444 preguntas.

Abal Medina sorteó sin sobresaltos su primer informe ante el Congreso, hace un pocos más de un mes en el Senado. Pero esta vez, los diputados de la oposición prometen “no ser tan benévolos” como los senadores y “exigirán” respuestas más precisas de parte del jefe de Gabinete.

El funcionario tendrá un tiempo para explayarse sobre su informe de gestión; luego cada bloque político desarrollaría su propio cuestionario para que responda el ministro, al que le podrán repreguntar o pedir precisiones. El tiempo de que dispondrá cada bloque político será proporcional a su representación en la Cámara baja.

Como principal bloque opositor, el radicalismo contará con más tiempo para preguntar. Según el jefe del bloque de diputados, Ricardo Gil Lavedra, la UCR pondrá como orden de prioridad los temas vinculados con “economía y corrupción”. Al mismo tiempo que tratará de profundizar en el cuestionario que remitió por escrito al jefe de Gabinete con “444 preguntas y subpreguntas”, de las cuales “72 están referidas a energía, 68 a economía y finanzas, 53 a Justicia y derechos humanos, 37 transporte y 36 a seguridad”.

El Frente Amplio Progresista y el Peronismo Federal contarán con un tiempo considerable para formular sus preguntas, aunque dividieron tareas entre los distintos bloques que conforman cada una de esas coaliciones parlamentarias. En el FAP, cada bloque hará hincapié sobre cuestiones puntuales, pero tampoco habrá límites para sus propios cuestionarios.

Las preguntas del macrismo y la Coalición Cívica rondarán sobre sus cuestionamientos a distintas políticas del Gobierno. El resto de los bloques y monobloques contará con mucho menos tiempo para tratar de conseguir respuestas a sus dudas.

Igual que sucedió en el Senado, el oficialismo no intervendría con preguntas propias en el recinto para no extender aun más la intervención del jefe de Gabinete. Aunque tampoco dudará en utilizar parte de su tiempo para facilitar las respuestas del ministro ante el embate opositor.