Poniendo fin a una semana de cruces y tironeos, luego de que la UCR mandara a las autoridades del Congreso la nota formal de respaldo a Leandro Despouy, ayer el kirchnerismo aceptó su continuidad al frente de la Auditoría General de la Nación. Despouy quedó así ratificado como titular de la AGN. Tras conocer la noticia, el funcionario la interpretó como “un paso atrás del oficialismo, que procuró mi destitución”.

La carta fue mandada por el titular de la UCR, Mario Barletta, a los presidentes de las dos cámaras, Amado Boudou y Julián Domínguez, tal como lo venían reclamando. Aunque los radicales plantearon en el texto una serie de objeciones, insistiendo en que a su criterio no era necesario porque Despouy no tenía su mandato vencido, la carta incluyó un párrafo con el que las autoridades de la Cámara se dieron por conformes. Dice: “La Unión Cívica Radical mantiene la confianza en el doctor Leandro Despouy, quien ha honrado el cargo, desempeñándose con decisión y probidad a lo largo de todos estos años. Estas manifestaciones despejan toda duda acerca de la voluntad de la UCR de que no haya modificación alguna en la titularidad de la Presidencia de la Auditoría General de la Nación”.

Despouy, amén de su crítica al oficialismo, destacó la importancia de que haya sido el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez (Frente para la Victoria), “el que haya cerrado el grave incidente provocado por el titular de la Comisión Parlamentaria Mixta Fabián Ríos, al pretender desconocer mi investidura al frente de la AGN”. Sin embargo, fuentes del kirchnerismo señalaron a Página/12 que con esta medida Despouy tiene seis años más de mandato, ratificando así que mantienen el criterio de que el cargo es por ocho años, a los que les descuentan los últimos dos, en los que consideran que el funcionario estuvo de manera irregular.

El conflicto se originó durante una reunión de la Comisión Mixta Revisora de Cuentas en la que su titular, el diputado kirchnerista Fabián Ríos, le comunicó a Despouy que su mandato estaba caduco desde marzo de 2010, por lo que no le reconocerían más en el cargo hasta que el radicalismo no cumpliera con los requisitos formales para la designación del titular de la AGN. El motivo era que a la función de Despouy se aplica la Ley de Administración Financiera, que fija un mandato de ocho años a los auditores. El funcionario había asumido en el 2002.

En su defensa, los radicales plantearon que la ley es del ’92, es decir dos años anterior a la reforma del ’94 que dio estatus constitucional a la AGN y que fijó que su titular sería designado “a propuesta del partido de oposición con mayor cantidad de legisladores en el Congreso”. Además, cuestionaba la constitucionalidad de algunos artículos de la ley. Ese mismo día, Despouy recibió un fuerte respaldo de parte de dirigentes de la oposición y una denuncia de la UCR sobre un “golpe de Estado institucional”.

El kirchnerismo, por su parte, no cuestionaba que fuera elegido por la UCR, sino que decía que la ley sí se aplicaba por lo que, cumplidos los ocho años, las autoridades del partido debían mandar una nota a los presidentes de las dos cámaras legislativas para que ellas le dieran continuidad formalmente. Finalmente, esto fue lo que sucedió ayer.

La ratificación de Despouy se produjo horas después de que fracasara por tercera vez consecutiva la convocatoria a una reunión de los auditores, por la ausencia de los representantes del oficialismo, que se mantuvieron encolumnados con el diputado Ríos.

Ante la imposibilidad de reunir a los auditores, Despouy convocó a una nueva reunión para el próximo martes 16, a las 14, que en este caso sí podrá ser llevada adelante con la regularización de su situación en el cargo.

Despouy también se presentó ayer a una audiencia en la Corte Suprema, donde fue convocado para brindar el informe en calidad de titular de la AGN sobre la gestión de Autoridad de la Cuenca del Matanza-Riachuelo, a cargo del saneamiento de la zona, aunque su exposición quedó postergada porque se definió un cuarto intermedio.