EL PAíS › LA PRESIDENTA CELEBRO QUE HAYA UN PAPA LATINOAMERICANO
› Por Nicolás Lantos
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner calificó la jornada de ayer como “un día histórico” por la noticia que llegó de Roma a mediatarde (hora argentina) de que el cardenal Jorge Bergoglio fue ungido como el nuevo papa, Francisco. Durante un acto en la nave de las ciencias de Tecnópolis, la mandataria le deseó al religioso “suerte en su labor pastoral” y, en una clara referencia al conflicto con Gran Bretaña por la soberanía del Atlántico Sur, le pidió que “lleve el mensaje a las grandes potencias del mundo para que dialoguen” y “pongan una mirada en los pueblos emergentes”. Un rato antes, había difundido públicamente una breve misiva dirigida al nuevo pontífice donde le enviaba saludos y felicitaciones en nombre “del gobierno argentino y el pueblo de nuestro país”. También, a través de su vocero, el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, confirmó que viajará al Vaticano la semana que viene para participar de la ceremonia de iniciación del papado, prevista para el próximo martes.
“Hoy es un día histórico. Por primera vez en los dos mil años de la Iglesia va a haber un papa que pertenece a Latinoamérica”, comenzó la Presidenta el pasaje de su discurso que le dedicó a saludar al nuevo pontífice, evitando cualquier tipo de confrontación, pero sin privarse de plantar una posición política. “Esperemos que realmente sea una labor significante para nuestra región”, manifestó en este sentido CFK, antes de pedirle al pontífice que en su labor ayude a “reencontrar a toda la humanidad, a todos los seres humanos en igualdad de condiciones, con amor, con justicia” y le deseó a Francisco “que pueda lograr mayor grado de confraternidad entre los pueblos”.
Luego de recordar que el nombre elegido por Bergoglio proviene de San Francisco de Asís y que el legado de aquel santo remite a la opción de la Iglesia por los pobres, dijo: “Espero que esa sea realmente la opción que puedan hacer las altas jerarquías. Es lo que deseamos, porque este es un gobierno que ha optado siempre por los que menos tienen y eso es lo que muchos no nos han perdonado”. La mandataria le deseó “toda la suerte del mundo en esta misión pastoral”. “Sé que hay muchos argentinos que tienen otra religión o piensan diferente, pero no hay ningún argentino que no crea y que no quiera que la humanidad viva mejor, que no haya guerras, que haya paz, que haya diálogo y confraternidad –agregó–. Vamos a apoyar siempre todo eso y allí estaremos.”
En el pasaje más político de su breve saludo, la jefa de Estado le encomendó al nuevo pontífice que “lleve un mensaje a las grandes potencias del mundo para que dialoguen”, en una referencia al diferendo con Londres respecto de la soberanía de las Islas Malvinas. “Queremos que el diálogo que tanto pregonan desde todas partes lo hagan y puedan convencer a los poderosos del mundo, a ellos que tienen armamentos, poder financiero, que finalmente dirijan una mirada hacia sus propias sociedades, hacia los pueblos emergentes, y que promuevan un diálogo de civilizaciones donde ninguna cuestión se resuelva por la fuerza”, alzó la voz la Presidenta. “En esa misión, y le pedimos a Dios que ayude a quien pueda hacerla posible para que las causas justas alguna vez triunfen en este bendito planeta que se llama Tierra”, concluyó.
A pesar de que la relación política entre la mandataria y el flamante papa no fue la mejor, Fernández de Kirchner es una ferviente católica y pocos minutos después de que se conociera que Bergoglio había salido ungido de la Capilla Sixtina difundió un breve mensaje de saludo. CFK, confiaron escuetamente fuentes del Gobierno, “conoce perfectamente sus profundas diferencias políticas” con Bergoglio, quien en sus duras homilías contra el oficialismo acuñara el término “crispación social”, pero busca en esta nueva etapa de la relación “limar algunas asperezas” y cooperar en el plano internacional siempre y cuando el religioso no intervenga en la política local.
“En mi nombre, en el del gobierno argentino y en representación del pueblo de nuestro país, quiero saludarlo y expresarle mis felicitaciones con ocasión de haber resultado elegido como Nuevo Romano Pontífice de la Iglesia Universal. Le hago llegar a su Santidad mi consideración y respeto”, dice la misiva de CFK. Además, el vocero presidencial y secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, confirmó que la jefa de Estado viajará a Roma para estar presente en la ceremonia de iniciación del papa Francisco, la semana próxima. “Va a ir a la asunción, que no les quepa ninguna duda”, manifestó el funcionario.
Así, la mandataria buscará dejar atrás una etapa de enfrentamientos que comenzó en 2004, durante el mandato de Néstor Kirchner. La idea de la Presidenta es ingresar “en una nueva fase de la relación”, aseguran en Casa Rosada. Esperan, como contraparte, un mensaje de buena voluntad.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux