EL PAíS
› ESTA SEMANA KIRCHNER DECIDE QUE HACER CON EL PAMI
Pensando en la intervención
Prefiere no hacerlo porque es “antipático”, pero no está descartado. Esta semana estaría disponible la información sobre la obra social que considera necesaria para decidirse.
”No me animaría a decir que el Presidente no vaya a intervenir el PAMI y tampoco estoy en condiciones de decir lo contrario.” Con esa frase cargada de misterio, el jefe de Gabinete Alberto Fernández se negó a dar precisiones sobre una eventual intervención a la obra social de los jubilados. “El Presidente inicialmente no quiso intervenir el PAMI, por eso sólo nombró dos directores, pero encontró muchísima resistencia para poder tener información y trabajar como corresponde. Eso lo determinó a pedirle al Poder Legislativo que le habilite la posibilidad de intervenir”, argumentó ayer el ministro en declaraciones radiales. En su rol de vocero oficial del caso PAMI, Fernández reveló que esta semana, luego de una serie de reuniones, el presidente Néstor Kirchner tomará la decisión de intervenir o no la mayor obra social del país.
“Yo estoy seguro de que el Presidente esta semana va a contar con información. Así se lo ha pedido a González Gaviola, y en cuanto tenga la información va a ser él quien resuelva si va a intervenir o no en función de lo que considere conveniente”, anticipó el jefe de Gabinete. Como en los días previos, en el oficialismo manifestaron ayer que si se tratara de deseos, preferirían no aplicar la intervención en el PAMI porque la consideran una medida “antipática”. “El objetivo no era la intervención.
Si vos podés meterte a hacer los cambios a fondo sin usar la intervención, la medida va a tener más acompañamiento”, argumentó ayer ante Página/12 el titular del bloque del PJ, José María Díaz Bancalari.
Luego de que la CGT aceptara reemplazar a los dos representantes gremiales en el directorio del PAMI, Domingo Petrecca y Reynaldo Hermoso, las autoridades de la obra social empezaron a revisar área por área y contrato por contrato. “Ayer se comenzaron a tomar algunas resoluciones y el objetivo fundamental era que este parálisis no afectara las prestaciones, que son la esencia de una obra social”, afirmó Carlos Granero, quien representa al Ejecutivo en el directorio del PAMI. “A partir de la última reunión del directorio algunas cosas han cambiado. El jueves tenemos otra reunión y pretendemos seguir avanzando”, dijo el representante oficial que secunda al mendocino Juan González Gaviola.
Mientras el Gobierno busca conocer la situación de la obra social, la CGT de los “gordos” se encuentra ante el dilema de reemplazar a Petrecca y Hermoso por dos figuras que no generen sospechas ni rechazos. No les está resultando fácil encontrarlas, por lo que transitoriamente dejarán vacantes esos dos cargos. “Por ahora no van a estar cubiertos”, confirmó a Página/12 un ministro del gabinete. Pese a las dificultades, la CGT oficial no está dispuesta a conceder uno de esos lugares a sus competidores de la CGT disidente. Sus líderes, Hugo Moyano y Juan Manuel Palacios, saben que será difícil conseguir ese espacio, algo que les prometió el propio Kirchner en un almuerzo en la Rosada.
“Para nosotros no es una prioridad”, aseguró ayer Moyano a Página/12. El camionero pretende estrechar lazos con el Gobierno, y una buena estrategia es diferenciarse de la CGT oficial. “Si nosotros hubiéramos tenido un hombre en el PAMI y nos pedían su renuncia, lo hubiéramos sacado inmediatamente”, se diferenció Moyano. Argumentos similares expondrá el miércoles próximo a las 11.30, cuando se entreviste con el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, en la Rosada.
En el encuentro, al que asistirá Palacios, los sindicalistas entregarán al Gobierno un documento reclamando un “aumento de salarios en forma general”. Y también hablarán del PAMI.
Entretanto, el ministro de Salud, Ginés González García, continuará con su tarea de impulsar un proyecto legislativo para transformar las estructuras del PAMI. La propuesta cuenta con el beneplácito de Kirchner, quien le ordenó a Ginés que avance con ese tema. El objetivo central es incorporar la obra social de los jubilados a la política sanitaria nacional e implementar un seguro nacional de salud, un recurso que permitiría integrar los sistemas de salud público y privado. El ministro ya adelantó los detalles del plan al diputado Díaz Bancalari, jefe del bloque peronista. “Necesitamos construir una política plural y participativa para garantizar a todos los ciudadanos el derecho a la salud”, apoyó Díaz Bancalari.
Subnotas