“Tenemos competitividad en la Argentina por varios motivos: porque tenemos, pese a algunos, el tipo de cambio más competitivo de toda la región. Porque, además, los servicios esenciales para la producción, como luz y gas, siguen siendo subsidiados por el Estado nacional. Son los servicios de los cuales no puede prescindir nadie”, afirmó ayer Cristina Fernández de Kirchner durante el anuncio del incremento de la Asignación Universal por Hijo y otras prestaciones que brinda la Anses. Las declaraciones de la Presidenta llegaron después de que el flamante titular de la UIA, el empresario plástico Héctor Méndez, advirtiera sobre la existencia de problemas de competitividad en la economía local durante la asunción de su tercer mandato al frente de la central empresaria.

La Presidenta también pidió cuidar las ventajas competitivas. “Hacemos un llamado a todos los dirigentes del país para que contribuyan a mantener la competitividad”, sostuvo. Además, destacó la relevancia de otras políticas públicas, como los subsidios al transporte público y las líneas de financiamiento, en los niveles de rentabilidad empresaria.

El flamante titular de la UIA no estuvo presente y la central quedó representada por su vicepresidente, José Urtubey, quien estuvo sentado en las primeras filas y fue tomado por las cámaras en diferentes oportunidades. Méndez responde a la línea interna de la UIA que está más alineada con los intereses del Grupo Techint, cuyo CEO, Paolo Rocca, protagonizó el año pasado un cruce de reclamos con CFK sobre la competitividad de la economía argentina.

Durante su discurso, la Presidenta también enfatizó que “tenemos recursos humanos altamente calificados” y recordó que el Estado también subsidia el transporte público. “Muchos creen que se subsidia únicamente a las empresas de transporte. No señor, estamos también subsidiando la fuerza de trabajo”, explicó. “Les pido a los empresarios que piensen un instante cuáles serían las demandas de los gremios si de repente los boletos de los colectivos o de los trenes subieran un 100 por ciento, un 40 por ciento, un 50 por ciento. Habría una inmediata demanda de aumento o de incremento salarial”, consideró la mandataria.