La Corte Suprema podría expedirse entre hoy y el miércoles sobre la elección popular de los miembros del Consejo de la Magistratura y, en ese marco, el tema estuvo en boca de oficialistas y opositores a la reforma judicial promovida por el Gobierno. El jefe del bloque del Frente para la Victoria en el Senado, Miguel Angel Pichetto, pidió a la Corte que actúe con “prudencia y responsabilidad”. Por su parte, el presidente del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, Jorge Rizzo, quien presentó uno de los amparos que llegaron al máximo tribunal, aseguró que detrás de la propuesta oficial hay una estrategia por una potencial reforma constitucional.

Pichetto se refirió al tema durante un encuentro sobre el funcionamiento de la Justicia que se realizó en Neuquén. “La Corte no está por encima de los otros poderes y debe actuar con responsabilidad, estableciendo las atribuciones propias que son del Parlamento”, señaló allí.

El senador advirtió que “no sirven los jueces que son teóricos cuando desconocen lo que pasa en lo público, no tienen una visión del Estado y se equivocan gravemente cuando toman decisiones judiciales afectando el interés de las grandes mayorías y del Estado nacional”.

Pichetto calificó además como “realmente lamentable” el fallo de la jueza María Romilda Servini de Cubría, que declaró la inconstitucionalidad de cuatro artículos de la ley para elegir mediante el voto popular a los consejeros de la Magistratura.

El encuentro, convocado para debatir los alcances de la reforma judicial, contó con la participación de funcionarios de Neuquén y Río Negro y legisladores nacionales y provinciales. “Es histórico, toda vez que se expanden derechos o se limitan privilegios, que aquellos sectores que tienen afectados sus intereses generan una batalla cultural”, señaló durante su intervención el senador Marcelo Fuentes. Y agregó que son sectores que “pretenden una democracia tutelada”, es decir, “una democracia siempre y cuando los sectores populares no pongan en riesgo sus intereses”.

A su turno, el gobernador de la provincia de Río Negro, Alberto Weretilneck, se preguntó “cuál es el motivo tan pecaminoso de que el pueblo argentino pueda elegir a aquellas personas que tienen la capacidad de elegir jueces y evaluar el desempeño de los mismos”. “Creo que esencialmente es la última gran batalla contra un núcleo cerrado, elitista, que piensa en sus intereses y que no piensa en los intereses de la gente, pero fundamentalmente es el único poder del Estado que no acompañó la transformación democrática de la Argentina.”

El miércoles pasado, después de que Servini de Cubría declarara inconstitucional la elección popular de los integrantes del Consejo, el Gobierno presentó dos per saltum relacionados con las dos impugnaciones presentadas contra la reforma del Consejo de la Magistratura por el apoderado de la Democracia Cristiana, Carlos Traboulsi, y el Colegio de Abogados de la Capital Federal, que encabeza Rizzo. La Corte aceptó avocarse directamente a estos casos sin que pasen por la Cámara de Apelaciones, y a resolver la cuestión en forma urgente, dado que el próximo sábado vence el plazo para la presentación de candidaturas para las PASO.

Ayer, consultado sobre el tema, Rizzo sostuvo que detrás de la reforma judicial “hay una estrategia por una potencial reforma constitucional”. Argumentó que “la Presidenta no tiene un pelo de tonta y hasta un chico se da cuenta de que, por lo menos la reforma del Consejo de la Magistratura, es inconstitucional”. Además cuestionó a la oposición: “La oposición está a veces resignada ante el hecho consumado. A veces tenemos que salir los actores sociales de otros lados a cubrir las falencias de la oposición de la Argentina”.