La presidenta Cristina Fernández de Kirchner consideró “imprescindible” que declaren los iraníes acusados por el atentado a la AMIA y subrayó la “necesidad” de que la Justicia avance en el “esclarecimiento” del ataque ocurrido el 18 de julio de 1994, para dilucidar también las responsabilidades en el encubrimiento de los culpables. Además, pidió a las nuevas autoridades de la mutual judía que soliciten “con la misma fuerza y publicidad de otras peticiones el inicio del juicio por encubrimiento”.

La Presidenta abordó el tema anoche, a través de su cuenta en la red social Twitter, en una sucesión de mensajes.

Recordó que el pasado jueves por la noche, en la Casa Rosada, recibió junto al secretario de Culto, Guillermo Oliveri, al presidente de AMIA, Guillermo Borger, y a las nuevas autoridades de la mutual, quienes hoy asumen sus cargos (ver aparte). Estaban, contó CFK, el presidente electo de la entidad, Leonardo Jmelnitzky, y el secretario general Ralph Thames Saieg.

“Borger, como siempre, locuaz, contento, súper atento –contó la Presidenta–. Me entrega publicaciones muy lindas de AMIA y un obsequio precioso. Una pequeña escultura en plateado y dorado. La Ciudad Santa de Jerusalén, vista desde una de sus puertas de entrada. Borger relata toda la labor de AMIA en lo social y agradece la colaboración del gobierno nacional y las distintas áreas en los planes y obras de la AMIA. Está contento. Se lo nota satisfecho por la tarea realizada y la ayuda del Gobierno. Es bueno reconocer trabajo y gestión. De todos y... todas.”

Cristina Fernández detalló que habló de “la necesidad de avanzar en el esclarecimiento del atentado (causa judicial estancada). Por eso es imprescindible que declaren los acusados iraníes que viven. Y sí, en Irán. Sin la colaboración de dicho país, no habrá declaración. Sin declaración, no hay juicio. Sin juicio, no hay condena. Por qué será que siempre en la Argentina hay que explicar lo obvio?”, se preguntó, haciendo una implícita defensa del memorándum firmado entre el gobierno nacional y el iraní para poder interrogar a los acusados por el atentado. “Los que no viven en Irán –siguió– son los que están acusados de encubrimiento en la causa AMIA. ¿Por qué? Y... porque son argentinos. Y viven... en Argentina. Lo que no es para nada obvio es por qué todavía no se ha juzgado a nadie. La causa judicial por encubrimiento se inició el 15/2/2000. Sí, hace 13 años. Más de tres mandatos presidenciales. ¿Las elevaciones para juicio oral? Anotá: 25/6/2008 y 20/3/2012. ¿El juicio oral? Bien, gracias. Reclamos: de 7 a 13 en el mostrador del Tribunal Oral Nº 2. ¿A quiénes? A los integrantes del Tribunal: jueces (Néstor) Costabel, (Jorge) Gorini y (Pablo) Bertuzzi. ¿Se dan cuenta de qué hablamos cuando hablamos de democratización de la Justicia?”

Luego, la Presidenta se refirió a los acusados en esa causa: “Entre otros el ex juez (Juan José) Galeano, los fiscales (Eamon) Mullen y (José) Barbaccia, el ex jefe de la SIDE Jorge Anzorregui y otros funcionarios de dicho organismo, el ex presidente de la DAIA Rubén Beraja, el ex presidente (Carlos) Menem, los comisarios (Jorge) Palacios y (Carlos) Castañeda. Palacios. ¿Se acuerdan? El ex jefe de la Policía Metropolitana. En fin. No sigo con la lista porque si no no termino más”.

“¿Cómo puede ser que estas cosas no se sepan o no salgan en los diarios? –se preguntó CFK–¿ O que no se escuchen los reclamos? Bueno, ahí está el temita: hay gente que no quiere o no le conviene que se sepa la verdad”, planteó. “¿Que cómo terminó la reunión? Re bien. Me conocen de cuando integraba la Comisión Bicameral de Seguimiento de la AMIA y la Embajada. Mi posición es la misma de entonces, y desgraciadamente no me equivoqué. También lo saben los familiares. Con algunos de ellos mantengo entrañable cercanía. Y con todos, compromiso de memoria, verdad y justicia. Le dije a la gente de AMIA que sería bueno solicitar con la misma fuerza y publicidad de otras peticiones el inicio del juicio por encubrimiento. Me parece que nos haría, no sólo más coherentes en el reclamo de castigo a los culpables, sino también más justos. Y más fuertes en el plano internacional. Además, aclaro, de acercarnos un poco más a la verdad.” Finalmente aseguró que les dijo a las autoridades de la mutual judía que “como presidenta de 40 millones de argentinos” no puede permitir que Argentina “sea una pieza de ajedrez del tablero geopolítico de las grandes potencias. Es mi deber. Y además mi convicción”.