La causa por el encubrimiento del Arzobispado de Bahía Blanca al ex capellán Aldo Vara, detenido en Paraguay luego de ocho meses prófugo, avanzó esta semana con el allanamiento de la casa del empresario Leopoldo Bochile, el apoderado que mes a mes cobraba los 2400 pesos de “subsidio por edad” que la Conferencia Episcopal paga a curas mayores de 68 años a través del Fondo de Solidaridad (Fides). En el allanamiento se secuestró documentación y una computadora, informó el Ministerio Público. El 9 de mayo, en el allanamiento al arzobispado a cargo de Guillermo Garlatti, se había secuestrado el poder de Vara a Bochile y los recibos por el cobro del “subsidio Fides”. El fiscal general Alejandro Cantaro, quien subroga al fiscal Antonio Castaño (de licencia) reiteró el pedido de indagatoria por encubrimiento de Garlatti y de Bochile. La decisión está en manos del juez subrogante Santiago Martínez, el mismo que el año pasado no había encontrado “elementos suficientes” para imputar al ex capellán militar.